JORGE MUÑOA (PAU)
88 ESPAÑA: Rodríguez (16), Herreros (12), Jiménez (2), Reyes (19), De Miguel (12) "cinco inicial", Corrales (3), Romero (5), De la Fuente (13) y Angulo (6).
74 ISRAEL: Goodes (3), Turgeman (3), Sheffer (17), Henefeld (12), Steinhauer (10) "cinco inicial", Katash (8), Shelef (16), Saffar (1), Daniel (-), Amsalem (-), Cohen Mintz (3) y Tapiro (1).
Arbitros: Radic (CRO) y Cazzaro (ITA). Sin eliminados.
España respondió al desafío que representaba el partido contra Israel, en el que necesitaba ganar obligatoriamente para no quedar eliminada del Europeo'99, y con el trabajo que le correspondía hacer cumplimentado se sentó a esperar a que Francia "que logró una victoria espectacular ante Eslovenia (74-69) en un partido que no se jugaba nada" terminara de darle el pasaporte para la fase final de París y le abriera la lucha por los Juegos Olímpicos de Sydney'2000.
Esta vez, el equipo español plantó cara a las dificultades con valentía. Saltó a la pista decidida a exprimir su última ocasión de seguir viva y no dio opciones a Israel, eliminada del campeonato tras haber sumado sólo dos victorias, una frente a Macedonia, que le dio el pase a la segunda ronda, y otra contra Eslovenia que era vital para la selección nacional, pero que finalmente no le sirvió para nada excepto para soñar con el pase hasta el último momento.
La ´fórmula Estudiantes´ en el cinco inicial de España, con Jiménez, De Miguel, Reyes y Herreros, madridista pero formado en el equipo colegial, mostró el camino a seguir contra los israelíes. A pesar de un 4-9 en la salida, el quinteto español supo incidir en el mayor punto débil de los hebreos, que es la falta de centímetros, apropiarse del rebote y utilizar la fuerza de los pívots en ataque a pesar de que el techo del equipo, Dueñas, vio todo el choque desde el banco.