Las prisas presidieron la visita que Àngel María Villar realizó el pasado jueves a las Pitiüses para supervisar algunas de las instalaciones deportivas de la isla, y para tener un acercamiento más próximo a la realidad del fútbol pitiuso, ya que ayer se tuvo que cancelar la recepción al Consell Insular y al Ayuntamiento de Eivissa debido a la polémica en el partido de Copa del Rey entre el Guadix y el Granada por lo que Villar tuvo que regresar a Madrid a primera hora de la mañana.
Además, el máximo mandatario del fútbol español fue acompañado en su visita las Pitiüses por el presidente de la Federación Balear de Fútbol, Antonio Borrás del Barrio, y del delegado insular de dicha federación, José Rosselló. El rápido vistazo a la isla comenzó con el primer desplazamiento del presidente del fútbol español a Formentera. Àngel María Villar hizo una visita fugaz a las instalaciones deportivas de la SD Formentera, además de realizarse diferentes actos protocolarios.
Posteriormente, y, con prisas, porque el tiempo apremiaba, el presidente de la RFEF se trasladó a Eivissa donde se reunió con los directivos de los clubes ibicencos. Cuando finalizó la charla, Villar realizó una visita fugaz a las instalaciones deportivas de Santa Eulària. Por último, la estresante jornada finalizó con una cena privada a la que asistieron autoridades políticas, medios de comunicación e invitados.