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Fútbol UEFA

El Alavés desafía a la historia

El conjunto de Vitoria afronta la final de la Copa de la UEFA con optimismo ante el laureado Liverpool

El entrenador del Alavés, Mané, conversa con sus jugadores en la última sesión preparatoria antes de la final.

RODRIGO ZULETA - ALEMANIA
El Alavés desafiará a la historia en la final de la Copa de la UEFA ante el FC Liverpool, en la que el club vasco saldrá en busca de su primer título sin hacer mayor caso de las opiniones de expertos que dan por favorito al equipo inglés. «En una final a partido único la historia no vale nada ni hay favoritos. Se trata de salir a jugar concentrados noventa minutos sabiendo que el triunfo significa el título», ha señalado el meta Martín Herrera.

El técnico del club vasco, José Manuel Esnal «Mané», considera que la temporada de su equipo en la Copa de la UEFA ya es un gran triunfo y que lo que pueda venir ya será un bono adicional. «Naturalmente, el Liverpool es favorito, pero en una final a partido único todo es posible», es una frase que el técnico vasco no se cansa de repetir, consciente de que su equipo ya ha eliminado a otros favoritos como el Inter. «Va a ser difícil. El Liverpool es un equipo con mucha experiencia y ha disputado varias finales, mientras que para nosotros será la primera vez», dijo al respecto el delantero Cruyff.

Más allá de las diferencias históricas, puede decirse que los dos equipos se parecen, puesto que basan sus éxitos en una sólida defensa y en la sangre fría que les permite aprovechar los errores del contrario. El Alavés ya quedó registrado en la conciencia del fútbol europeo como un equipo modelo en cuanto al contragolpe se refiere tras el partido de vuelta contra el Kaiserslautern, cuando le entregó el campo al conjunto alemán para al final marcar cuatro goles.

Sin embargo, del lado del Liverpool, se tiene la convicción de que los partidos se ganan en la retaguardia, por lo que el Alavés puede tener problemas para encontrar espacios para explotar el contragolpe. «Sabemos que los partidos se ganan en defensa. Siete u ocho hombres trabajan en nuestro equipo hacia atrás, por lo que con nuestro 4-4-2 logramos tener una defensa muy sólida», ha dicho el centrocampista alemán del Liverpool, Dietmar Hamann.

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