Efe|CASTELLÓN
La caravana del Dakar 2004 abandonó ayer Europa y saltó desde
Algeciras a la localidad marroquí de Tánger con dos franceses al
frente de las clasificaciones de coches y motos una vez concluida
la tercera etapa, con una única especial de nueve kilómetros en
Castellón.
Stephane Peterhansel (Mitsubishi) arrebató el liderato en coches al español Josep Maria Serviá (Schlesser-Ford) en una cronometrada que concluyó en la playa de Castellón, repleta de público, y que ganó el surafricano Giniel de Villiers (Nissan), a quien no afectó el accidente que sufrió anteayer.
Serviá fue undécimo y perdió 13 segundos respecto a De Villiers y ocho con Peterhansel, tercero en la meta de Castellón, con lo que se convierte en el líder de la carrera en vísperas de que entre en Africa por Marruecos. El español se encuentra ahora a cinco segundos del francés.
En categoría de motos, el francés David Fretigne (Yamaha) repitió victoria después de la de ayer en Narbona. Fretigne empleó 6.13 minutos en llegar a la meta y aventajó en un segundo a su compatriota Cyril Despres y en cinco al italiano Giovanni Sala. Cuarto fue el español Isidre Esteve, mientras que Joan Roma entró en novena posición a 33 segundos del ganador.
«La etapa de hoy», dijo Roma tras concluir la jornada, «con un recorrido de arena bastante blanda, tenía su punto de dificultad como han demostrado algunas caídas, pero lo importante era entretener a los aficionados que han venido a vernos y creo que eso lo hemos conseguido». El mallorquín Toni Manresa, con Pep Vila, ocupa la vigésima posición en la categoría de camiones.