El plazo de fichajes para la liguilla de Regional de Preferente se cerró ayer sin que hubiese noticia de la UD Ibiza, que no pudo finalmente solventar la deuda de 9.000 euros que mantiene con Alfredo Santaelena y que imposibilita al club a hacer nuevas licencias.
Emanuele Maffezzoni, inversor italiano del club, se quejó amargamente de esa circunstancia y culpó al entrenador madrileño: «He luchado hasta el final para intentar arreglar esa situación, pero ha sido imposible. Santaelena no cogió el teléfono en todo el día y, por su culpa, no se ha podido tramitar las nuevas licencias. Pero que nadie diga que no lo he intentado, porque lo he hecho hasta el último momento».
Maffezzoni también indicó que, a partir de la próxima semana, podría estudiar el invertir en la SD Ibiza, club que desapareció en la temporada 1991/92 y que costaría 200.000 euros volver a reflotar. «Me quiero reunir con los responsables para hablar seriamente de esta posibilidad», indicó el italiano, que afirma que empieza a estar harto de tantas críticas vertidas hacia su persona. «No soy un mafioso, ni un cantamañanas. Si no me dejan trabajar en paz, me iré, pero no estoy dispuesto a que me ataquen personalmente cuando lo que quiero es ayudar a Eivissa», añadió.
La jornada
Por otra parte, entre hoy y mañana se disputan los encuentros de la tercera jornada de la liguilla. El Luchador, nuevo líder de la competición, intentará mantener su buena racha de resultados hoy en el Municipal de Sant Antoni (17,00 horas) ante un Sant Jordi que ha perdido muchas de sus opciones de disputar el play off a Tercera tras perder en las dos primeras jornadas. Por su parte, la UD Ibiza recibe mañana en Can Misses (19,00 horas) al Portmany en un partido en el que ninguno de los dos se puedan permitir un nuevo tropiezo.