La cuenta atrás hacia el final del campeonato liguero avanza clarificando las posiciones tanto en la zona noble como en el sótano de la categoría balear. Para la Peña Deportiva, su visita al feudo del Montuïri, el campo municipal de es Revolt, supondrá esta tarde mucho más que tres puntos (16,00 horas).
El cuarto enfrentamiento directo para los pupilos de Matías Fernández se presenta decisivo después del revés sufrido en casa frente al Llosetense (1-2), en un encuentro en el que los errores defensivos fueron determinantes. La Peña tiene la obligación de ganar esta tarde al cuarto clasificado para no descolgarse prematuramente de la lucha por los puestos de play off, que actualmente divisa a tres puntos de distancia. No hay que olvidar, eso sí, que el conjunto ibicenco aún debe disputar su partido aplazado con el Binissalem, por lo que cuenta con un pequeño margen respecto a sus rivales.
El Montuïri es, precisamente, el equipo que marca la zona de ascenso, por lo que una derrota en tierras mallorquinas alejaría el objetivo de los peñistas a seis puntos, una cifra muy considerable teniendo en cuenta que todavía debe enfrentarse con equipos como el Binissalem (2º) o el Santanyí (3º).
Para el primero de los tres desplazamientos consecutivos que tiene el combinado de Santa Eulària, Matías Fernández recupera a sus dos centrales, Berto Suárez y Rubén Martínez, además del extremo Osky, aunque no podrá contar con el sancionado Manolo Aparicio ni con el lateral izquierdo Fofi, por lesión. A ellos se suma la baja por asuntos personales de Berto Vaquero, desplazado a Menorca después del fallecimiento de un familiar.
El Montuïri, por su parte, acumula 10 jornadas sin perder y viene de doblegar al Ferriolense por la mínima. Óscar Troya, preparador del colectivo mallorquín, cuenta en sus filas con goleadores como Sergi Rojals (15), Aitor Pons (11) o Lucas Pou (9), circunstancia que supone una auténtica amenaza para una Peña que necesita recuperar su solidez defensiva y demostrar ambición y pegada ante equipos de su envergadura.
«Guardo un buen recuerdo de mi debut»
Matías Fernández debutó en el banquillo de la Peña precisamente frente al Montuïri, y lo hizo con victoria por 2-1. «Guardo un buen recuerdo de ese partido porque fue mi debut. Sería muy importante ganarles de nuevo para tener a favor el 'gol average'», señaló ayer el preparador de la Peña quien, no obstante, resta trascendencia al resultado del encuentro: «No lo considero decisivo, aunque los tres puntos son importantes frente a un rival directo. Quedan muchos puntos y una derrota no sería definitiva porque tenemos un partido menos que el resto [el aplazado ante el Binissalem]».