La UD Ibiza jugará la próxima temporada en Tercera División después de que el Comité de Competición de la Federación Balear de Fútbol desestimara el recurso presentado por el Santanyí, equipo contra el que se enfrentaron los ibicencos en la última eliminatoria de ascenso.
El club mallorquín entendía que el equipo vilero se inscribió en el registro de entidades deportivas en mayo del año pasado y, por tanto, no cumple con el requisito de dos años de permanencia en la Regional Preferente que exigen los estamentos federativos para poder subir a Tercera División.
Sin embargo, el Comité de Competición no ha estimado la impugnación del Santanyí y el club presidido por Amadeo Salvo jugará el año que viene en categoría nacional. Eso sí, el club mallorquín todavía puede apelar la decisión de la Federación Balear en el Comité de Apelación e, incluso, llegar al Tribunal Balear del Deporte. Una camino que al parecer tomará el Santanyí según las declaraciones que el presidente del club, Bernat Picó, hizo ayer a Radio Ibiza.
Picó añadió en la SER que «alguien ha cometido un error, porque si ahora se tolera una situación de este tipo, a lo mejor otros equipos emplearemos estrategias similares a las de la UD Ibiza».
Además, el presidente del Santanyí se mostró convencido que será su club el que finalmente juegue en Tercera División.
Por su parte, desde la UD Ibiza no reaccionaron ayer ante la noticia pero la semana pasada, a través de un comunicado, aseguraron que el club «se reserva el derecho de poder ejercer cualquier acción legal contra aquellos que, con malas artes, pretendan mancillar su profesionalidad y honorabilidad».