La Vuelta a Ibiza tiene nuevos líderes. David Valero y Pablo Rodríguez se hicieron con el maillot amarillo tras la segunda etapa, con final en Santa Eulària. Por su parte, Celina Carpinteiro y Charlotte Davies volvieron a ganar en categoría femenina y dejan la prueba casi sentenciada. En una jornada marcada por el viento, los ciclistas tuvieron que enfrentarse al recorrido más complicado de los tres días: 80,5 kilómetros con 1.980 metros de desnivel.
La dureza pasó factura a Julen Zubero y José Luis Carrasco, primeros líderes, que no pudieron seguir el ritmo de los ganadores y que, además, sufrieron la mala fortuna de pinchar en los últimos kilómetros, cayendo al tercer puesto de la clasificación general. De esta circunstancia se aprovecharon Valero y Rodríguez, segundos anteayer, para dar un golpe sobre la mesa y vencer con un tiempo de 3h18'23''. La pareja formada por Marzio Deho y Jacopo Billi entró en meta en la segunda posición (3h20'31''). Los resultados dejan la clasificación general en manos de los españoles, que aventajan en más de cuatro minutos a los italianos.
La zona de Sant Rafel, el alto de es Camp Vell y el Puerto de Sant Miquel, auténticos rompepiernas, marcaron la primera mitad de la etapa, que dejaba para el final dos subidas extremas: sa Talaia de Sant Joan y sa Cala. Fue en estas últimas ascensiones donde se rompió la carrera.
«Los primeros 40 kilómetros fuimos juntos un grupo bastante grande, de unas 10 parejas, y conforme iban pasando los kilómetros se fue haciendo un poco más de selección. Durante los 30 últimos kilómetros, pusimos un ritmo bastante exigente. Justo después del segundo avituallamiento –en el kilómetro 46- nos quedamos ya solos. Estamos muy contentos con este maillot amarillo que vamos a intentar conservar», declaró David Valero.
Las féminas también dieron un buen espectáculo en esta jornada. La portuguesa Celina Carpinteiro y la inglesa Charlotte Davies hicieron un gran esfuerzo para destrozar a todas sus rivales y llegar a la meta con casi nueve minutos de ventaja. De esta manera, dan un golpe casi definitivo a la general. Con casi 18 minutos de margen, sólo un desastre impediría su victoria.
La sorpresa la protagonizó Aleix Espargaró, que, junto a Ibon Zugasti, entró noveno en la línea de meta, un grandísimo resultado para el piloto de motociclismo. Hoy se celebra la última etapa de la Vuelta, con salida y llegada en Sant Antoni. Será la más corta, con 53,8 kilómetros. El inicio está programado a las 09.00 horas y se prevé que los ganadores lleguen sobre las 10.45.