La UD Ibiza, con el mismo once de la semana anterior, se impuso este sábado al Hércules (2-1) en un partido en el que fue de más a menos. El talento de Bebé marcó la diferencia en un choque en el que los pitiusos prácticamente acabaron pidiendo la hora.
La Udé empezó el partido con confianza y exhibiendo cierta superioridad. Tanto Unai Medina, por la derecha, como José Albert, por la izquierda, eran capaces de sumarse al ataque con peligro, alcanzando la línea de fondo. Precisamente el lateral izquierdo forzó una falta al borde del área que Bebé lanzó por encima del larguero.
El caboverdiano fue poco a poco acaparando los focos. En una de sus internadas por la banda, le hizo un traje al defensa y sirvió un preciso pase de la muerte que Gallar transformó en el primer gol del partido. El conjunto ibicenco mandaba en el marcador tras poco más de un cuarto de hora de juego.
Los herculanos, lejos de hundirse, despertaron. De hecho, comenzaron a dominar ligeramente el partido y acabaron empatando al filo de la media hora de juego. Una pérdida de Del Pozo la aprovechó bien el conjunto blanquiazul, que subió el 1-1 al marcador gracias a un gran disparo raso de Ben Hamed desde la frontal del área.
Los locales echaban en falta algo más de protagonismo por parte de Fede Vico y Gallar para encontrar huecos en la zaga oponente. Con todo, el cuadro pitiuso replicó en cuestión de cinco minutos.
Tras un remate de Sofiane rechazado por la zaga, Bebé acabó lanzando un trallazo al palo largo desde el vértice del área, con rosca incluida, que superó al guardameta visitante. Los aficionados se levantaron de sus asientos. Algunos incluso se echaban las manos a la cabeza. Y es que el 'siete' celeste no marca goles, sino golazos.
En la recta final, Sofiane dispuso de un par de oportunidades para ampliar la ventaja. En una, completamente solo a pase de Vico, lanzó la pelota a las nubes y, en otra, remató raso a las manos del portero. Eso sí, en ambas ocasiones el juez de línea levantó la bandera por fuera de juego.
Tras el descanso
El segundo acto comenzó con dos aproximaciones en apenas dos minutos, una para cada bando. Bebé probó fortuna con uno de sus latigazos, pero el portero atrapó bien la pelota. Acto seguido, el recién entrado Samu Vázquez cabeceó fuera un centro de Oriol Soldevila. Inicio eléctrico.
Las malas noticias llegaron poco después, cuando Bebé se lesionó en una bonita acción individual en el área en la que acabó chutando fuera. Paco Jémez le reemplazó por Glazer, que desplazó a Ernesto a la banda.
La Udé bajó notablemente sus prestaciones sobre el terreno de juego. El Hércules se hizo con el control del partido y Rojas tiraba del carro con el objetivo de conseguir la igualada. Al equipo ibicenco se le apagaron las luces. La UD Ibiza estaba irreconocible.
Con todo, la verdad es que Ramón Juan no pasó apuros. A los herculanos les costaba generar peligro a pesar de tener la pelota en su poder. Rojas fue el único que buscó el gol en un disparo que salió lamiendo el palo. Anteriormente, el conjunto visitante pidió un 'challenge' por un posible penalti de Ernesto sobre Retuerta, pero el árbitro, tras chequear las imágenes, no reculó en su decisión inicial.
El técnico celeste optó por reforzar el equipo defensivamente dando entrada a Mounir y Señé por Fede Vico y Gallar. El cordobés le vio las orejas al lobo y optó por cerrar espacios. La segunda parte continuó siendo un sufrimiento para la afición ibicenca, que veía que a los suyos no les quedaba otra que defender con uñas y dientes. La Udé pidió challenge en una posible pena máxima sobre Mounir, pero de nuevo el trencilla no pitó nada tras revisar el FVS.
Finalmente, el marcador no sufrió cambios. La UD Ibiza enlazó su segunda victoria de la temporada y duerme líder a expensas de lo que este domingo haga el Marbella. Queda trabajo por hacer, pero los seis puntos disputados hasta ahora están en el zurrón.