La Comisión de Control, Ética y Disciplina de la UEFA ha acordado este jueves imponer una multa de 30.000 euros al Barcelona por la masiva presencia de banderas independentistas, y de cánticos de ese signo, durante la final de la Liga de Campeones, que se disputó el pasado 6 de junio en Berlín.
A finales de junio la UEFA abrió un expediente al Barcelona, que este jueves se ha resuelto con la imposición de una multa de 30.000 euros.
El club se enfrentaba a una multa económica que podría alcanzar los 60.000 euros o, incluso, el cierre de alguna zona del Camp Nou en un próximo partido de la máxima competición continental.
El Barcelona presentó alegaciones y mostró su sorpresa porque el informe presentado ante la UEFA fue elaborado con las informaciones recogidas por la transmisión seguida por televisión y no presencialmente.
El informe estaba firmado por la abogada ucraniana Anna Bordiugova, miembro del equipo de inspectores de la comisión disciplinaria de la UEFA que preside el chipriota Chris Georghiades.
En el informe del delegado de la UEFA en aquel partido, el holandés Harry M. Been, se destacaba el «excelente comportamiento» de los aficionados del Barcelona; así como en la grada azulgrana no se utilizaron artefactos de pirotecnia y los cánticos de su afición «no fueron discriminatorios».