La entidad ecologista Oceana ha denunciado que la Dirección General de Medio Rural y Marino del Govern Balear está ocultando información de interés ambiental relativa a la vigilancia y el seguimiento en Reservas Marinas, actividades que debería llevar a cabo el organismo en las siete reservas existentes en Baleares.
Según han explicado desde el grupo ecologista, Oceana solicitó esa información en agosto y en noviembre, al no haber recibido respuesta dentro del mes establecido por ley, quiso conocer el nombre del instructor del expediente para solucionar los problemas que impedían la entrega de esa información. En octubre, se denegó la entrega de la información solicitada al considerar, según Oceana, que esa información «no tiene interés ambiental alguno y por lo tanto no se enmarca en dicha Ley».
«Nos hemos visto obligados a presentar un recurso, aportando todo tipo de argumentos para demostrar el interés ambiental que, sin lugar a dudas, tiene la información solicitada», ha lamentado Ricardo Aguilar, director de Investigación de Oceana en Europa.
Asimismo, ha señalado que «todas estas trabas muestran la intención de ocultar información que al Govern no interesa que se conozca, lo que indica que no se debe estar realizando una gestión adecuada de las Reserva Marinas y, en caso contrario, no debería haber ningún problema en publicarla».
Según ha destacado Oceana, el seguimiento y la vigilancia de las áreas marinas protegidas son dos pilares esenciales para asegurar su buen funcionamiento y efectividad. El seguimiento permite saber si está funcionando correctamente, es decir, si aumentan la biomasa y las tallas de los recursos pesqueros y se recuperan especies sobreexplotadas y sensibles a la pesca y también permite tomar medidas de gestión correctoras para solucionar los problemas detectados.
Por otra parte, la vigilancia asegura el cumplimiento de las normas establecidas, impidiendo actividades perjudiciales para la conservación de los recursos marinos como el furtivismo o la pesca con aparejos ilegales.
Oceana ha asegurado tener constancia que desde el año 2011, como mínimo, no se están llevando a cabo las tareas de seguimiento. La vigilancia ha disminuido prácticamente a la mitad en Mallorca y los recursos para su desarrollo han disminuido en todas las islas.
CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO
«Si no nos facilitan esta información, el próximo paso sería interponer un contencioso administrativo, con los costes y perjuicios que ello implica. Deseamos no tener que llegar a esa situación y que se divulgue esa información lo antes posible, ya que la Dirección General de Medi Rural i Marí está obligada a velar por la correcta gestión de las Reservas Marinas, las cuales son patrimonio de todos», ha insistido Aguilar.
La Ley de pesca balear determina en sus artículos 8 y 11 que todas las Reservas Marinas deben contar con un servicio de vigilancia y deben ser objeto de un seguimiento regular y periódico, biológico y pesquero, con el fin de conocer la evolución de los recursos marinos y las actividades pesqueras, han concluido desde Oceana.