La producción de vino ha ascendido a 48.675 hectolitros en las Islas Baleares en 2014, un 5,8 % menos que el año pasado, un descenso en el que ha influido la escasez de lluvias durante el verano que ha dado lugar a menos uva si bien es de mayor calidad.
De esta producción, 27.917,98 hectolitros están amparados bajo las denominaciones de origen Binissalem y Pla i Llevant, y el resto, 20.757,77 hectolitros, se etiquetarán como Vino de la Tierra, en su mayoría de Mallorca, ha informado la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio en un comunicado.
El descenso de producción se debe a las condiciones meteorológicas del último verano, con escasez de lluvia y altas temperaturas también durante el mes de septiembre. Sin embargo, la falta de humedad ha influido muy positivamente en la calidad de la uva y ha favorecido un estado fisiológico de la vid excelente.
Dicha falta de lluvias sumada a las elevadas temperaturas ha influido en la composición química de la uva, que tiene un contenido bajo de agua y por tanto una concentración aromática más alta. Por ello el rendimiento de litros de vino por kilogramo de uva ha sido más bajo en la cosecha de 2014, de un 63 %, mientras que tras la vendimia de 2013 fue de un 65 %.
En total, han entrado 7.695.554 kilos de uva en las bodegas de las Illes Balears, un 3,51 % menos que en 2013. A pesar de este descenso, la última cosecha ha sido la tercera más elevada de los últimos diez años en el archipiélago, sólo por debajo de la de 2010, en que se produjeron 8.338 toneladas de uva, y de la de 2013.
En cuanto a la superficie de viñedo en producción en las Islas Baleares en 2014, ha sido de 1.439,15 hectáreas, lo que representa un 7,37 % más que en 2013.
De ellas, 746,44 están amparadas bajo alguna denominación de origen, y el resto, 692,71 hectáreas, están destinadas a la producción de Vino de la Tierra.
En cuanto al tipo de vino, la mayor parte es tinto, con 27.271,5 hectolitros, un 5,5 % más que el año pasado. Sin embargo dicha cantidad es la tercera producción más elevada de la última década en Baleares, tras los 35.945 hectolitros de 2010 (año récord) y los 28.179 de 2012.
Por el contrario, la producción del blanco y el rosado ha disminuido respecto al año 2013. En concreto se han producido 13.586,93 hectolitros de vino blanco, un 16,6 % menos; y 7.817,28 de vino rosado, cifra que supone un descenso del 18 %.
Por denominaciones de origen, la de Binissalem ha elaborado 15.683,80 hectolitros de vino, un 15,95 % menos que el año anterior, mientras que Pla y Llevant ha elaborado 12.234,18, un 16,12 % más que en 2013.
En cuanto al Vino de la Tierra, el de Mallorca continúa liderando la producción, con 17.781,75 hectolitros, aunque desciende un 8,44 %. También destaca el incremento de un 30,85 % del Vino de la Tierra Isla de Menorca, con una producción de 1.196,44 hectolitros.
Se han producido 1.457,35 hectolitros de Vino de la tierra de Eivissa, un 16 % menos; 165,65 de Vino de la tierra de Formentera, un 13,57 %; 79 hectolitros de Vino de la tierra Serra de Tramuntana un 40 % menos; y 77,58 hectolitros de Vino de la tierra Islas Baleares, un 16,68 % menos.