La fumigación aérea para combatir la procesionaria no está, de momento, entre los planes de la Conselleria de Medi Ambient i Agricultura. El conseller Vicenç Vidal explicó este martes ante el Parlament las medidas previstas por Sanidad Forestal para erradicar la plaga y se abstuvo de hablar de fumigaciones aéreas como las realizadas en 2014 y que vinieron acompañadas de polémica.
Vicenç se limitó a exponer la situación actual y recordó que es responsabilidad de los ayuntamientos combatir la plaga en las zonas urbanas. En jardines privados o zonas forestales las actuaciones deben ir a cargo de los particulares, explicó el conseller.
Interpelado por el Partido Popular y Podemos sobre las medidas que piensa adoptar el Govern, Vicenç Vidal recordó que las elevadas temperaturas de este invierno y la falta de precipitaciones han propiciado que las orugas bajen de los pinos para enterrarse antes de lo habitual. Tal y como avanzó Ultima Hora, el mapa de 2016 sobre las zonas afectadas no estará listo hasta el mes de abril y el conseller recordó que el año pasado la zona afectada por la procesionaria se había reducido considerablemente «por las aplicaciones aéreas». El conseller apuntó también que a partir de este año, las trampas con feromonas que se utilizaban en verano han sido prohibidas por el Ministerio y son ilegales. Así pues, las actuaciones para luchar contra la plaga se limitan a la erradicación de las bolsas de los pinos o aplicar productos fitosanitarios, siempre a cargo de profesionales.