La Comandancia General de Baleares presentó este viernes su Plan Vigilante Balear a los medios de comunicación. Este plan, novedoso, consiste en la vigilancia, por parte de tropas del Ejercito de Tierra, de lugares sensibles de la Isla donde pueda producirse un incendio.
En su toma de posesión como nuevo comandante general, Juan Cifuentes anunció que el medio ambiente iba a ser una prioridad durante su mandanto. De ahí esta iniciativa que se pone en marcha ahora y que supone un refuerzo a la que ya se realizaba, pero solo en instalaciones militares; entre ellas, el campo de tiro o de maniobras de la base Jaime II; Cabo Pinar, Refeubeitx y Banco de Ibiza, Santa Magdalena o Cabrera.
Aprovechando estas actividades habituales que se venían realizando en zona militares nace Vigilante Balear, que ampliará su radio de actuación en colaboración con las instituciones civiles para mejorar y preservar el medio ambiente. Algunas de las actividades previstas en dicho plan ya están en marcha, como la vigilancia en Cabrera donde un destacamento se encuentra ya instalado desde el pasado mes de mayo y permanecerá allí hasta finales de septiembre, ayudando a la conservación y prevención en el parque natural. El destacamento de Cap Pinar, en Alcúdia, realizará labores de vigilancia para controlar que en la zona no se produzca ningún riesgo para el medio ambiente. También se realizarán patrullas periódicas en diversas zonas de Santa Magdalena o Refeubeitx (calvià).
Toda la información que se recoja se le facilitará a la UME para prevenir la máximo el riesgo de incendios. En el operativo toman parte 40 personas.