La Sindicatura de Comptes constata en su último informe de fiscalización de la UIB, del año 2015, que la institución superó ligeramente el límite legal de personal docente e investigador con contrato laboral. La ley permite que el 40 por ciento de la plantilla esté en esta situación, pero la Sindicatura constata que la cifra fue del 41,8 por ciento ese año. También señala que los profesores contratados doctores deben ser indefinidos, pero se detectaron un total de 48 con contratos temporales.
El informe da por buena la fiscalización de la UIB aunque precisó que la escasa información enviada por la Fundació Universitat Empresa dificultó el trabajo en esta entidad dependiente.