Un centenar de pasajeros se han visto afectados por un retraso de más de 17 horas que ha sufrido un vuelo entre Menorca y Zaragoza. La compañía Volotea, después de varias demoras, canceló a medianoche del sábado el vuelo que debía haber despegado a las 19.50 horas, de modo que muchos de los pasajeros se han visto obligados a pasar la noche en la calle, debido a que el aeropuerto de Menorca cierra por la noche y no reabre sus puertas hasta las 6.30 horas de la mañana.
Uno de los viajeros afectados ha explicado a Ultima Hora que solo se ofreció alojamiento a las familias con niños, que fueron enviados a distintos hoteles a partir de la medianoche, cuando finalmente se confirmó la cancelación del vuelo. Sin embargo, el resto de pasajeros, unas 60 personas, quedaron «tiradas fuera del recinto, ya que AENA nos dijo que el aeropuerto de Menorca cierra por las noches y no podíamos quedarnos allí» a esperar la salida del vuelo, anunciada para la mañana del domingo.
Según informa uno de los pasajeros afectados, el vuelo tenía que salir a las 19.50 horas del sábado. Tras continuos retrasos, subieron al avión, pero «nos sacaron literalmente para que volase a Verona y ya había gente sentada» y finalmente el viaje fue cancelado. La opción era hacerlo este domingo, y para ello Volotea citó a los pasajeros a les 8 de la mañana.
Muchos han tenido que buscarse por su cuenta un sitio para pasar la noche, llegando al hotel a las 2 de la madrugada para volver a salir sobre las 6, pues tenían que estar en el aeropuerto a las 8.
No obstante, la particular odisea de los pasajeros ha seguido este domingo, con continuos retrasos sobre la hora anunciada. Finalmente, y tras un madrugón que ha resultado inútil, los pasajeros afectados han podido despegar a las 13 horas rumbo a Zaragoza, llegando a la capital aragonesa sobre las 14 horas y tras una noche muy corta y ajetreada.