La subida encubierta del impuesto sobre la renta de las personas físicas castigará a cada contribuyente balear con el pago de 215 euros más de media. Las Islas serán la tercera comunidad donde más suba el IRPF como consecuencia de la inacción del Gobierno al no haber deflactado este tributo, esto es, no haber aplicado mecanismos para compensar el nivel más alto de inflación que España ha experimentado en los últimos 30 años. Concretamente, la tasa de inflación en 2021 se situó en el 6,5 % en el conjunto del país. Si las autoridades no incorporan medidas para actualizar los impuestos y mitigar el impacto sobre el sistema fiscal en general, éste se descontrola y los tributos se disparan. El impuesto más sensible a la inflación, por su progresividad, es justamente el IRPF.
Es lo que se conoce como progresividad en frío o rémora fiscal, que al pasar desapercibida supone una subida impositiva encubierta y como tal apenas tiene coste político: la administración se asegura el incremento recaudatorio simplemente no haciendo nada. El resultado, un mordisco de 4.110 millones de euros de más que los españoles van a pagar al fisco y que en el caso de Baleares asciende a algo más de 115 millones de euros. El archipiélago es la tercera comunidad autónoma donde más se va a incrementar el impuesto.Los 215 euros extra de media que va a pagar cada contribuyente de las Islas solo se ven superados por los 240 euros de los madrileños y los 231 de los catalanes. Asimismo, supera en 16 euros la media estatal, situada en 199 euros.
Así lo plasma un estudio del catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Complutense, José Félix Sanz, el cual detalla el coste de esta subida encubierta del IRPF a la que los contribuyentes tendrán que hacer frente en la primavera de este año. El hecho de que Balears esté en las comunidades más afectadas entra también dentro de lo normal, según el catedrático, puesto que «a más renta y más base liquidable mayor es el impacto del tributo por la inflación». De este modo, «es normal que en las comunidades más ricas el impuesto suba más».
Félix Sanz cita al economista Milton Friedman al subrayar que «la inflación es el impuesto sin legislación» y recalca que este tipo de subidas suelen ser del agrado de la clase gobernante al minimizar el desgaste político. «Es una ventaja para ellos porque consigues un aumento recaudatorio muy significativo sin hacer nada. Estás capitalizando la ganancia». El estudio del catedrático se ha realizado con datos del Instituto de Estudios Fiscales (IEF) y la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT). Los datos se corresponden con la última muestra disponible, de 2018, aunque reajustados a través de una simulación para calcular una aproximación a los de 2021.
Este hecho podría llegar a relativizar o suavizar la subida impositiva finalmente en Balears, según apunta Pau Montserrat, perito especializado en productos financieros y divulgador de economía en las Islas. La esperanza para el contribuyente balear, básicamente, es que el duro impacto de la pandemia en la economía balear –más dañina que en otras regiones por el peso del sector turístico– mitigue de alguna manera la subida tributaria. «El año pasado supuso una debacle para las rentas de los trabajadores, tanto asalariados como autónomo, con plantillas en ERTE, etc.». Eso, según Montserrat, debería verse reflejado en un atemperamiento del incremento impositivo.