El Ayuntamiento de Sanxenxo, en Galicia, pagará el alquiler de cuatro viviendas este verano para ponerlas a disposición de médicos de familia, de fuera de este municipio, que quieran ir a cubrir la demanda desde el 1 de junio y hasta el 30 de septiembre. Una idea que, el presidente del Sindicato Médico de Baleares, Miguel Lázaro, aplaude y pide para las Islas donde hay que cubrir especialistas. «Nuestra situación es peor que la de Galicia», recuerda. «Si la Conselleria es incapaz de captar y fidelizar a médicos, porque se está demostrando, que al menos copien lo bueno de otras comunidades, aunque sean del PP», añade.
«Nosotros lo que pedimos es que haya una estrategia o protocolo especial para plazas de difícil cobertura para todo el año y sobre todo en verano, porque hay mucho más consumo sanitario», explica el representante sindical mayoritario del sector. La previsión para este verano no es buena si se tiene en cuenta que, más allá de las listas de espera agravadas por el efecto de la pandemia, los servicios de Urgencias de toda la comunidad han marcado máximos históricos en el mes de mayo. La temporada turística ya se da por empezada y en junio empiezan a darse vacaciones al personal sanitario sin que se haya conseguido el refuerzo para afrontar el característico incremento de demanda del verano. «La gente viene aquí por la excelencia turística, por seguridad y porque la sanidad pública es una garantía», señala el doctor Lázaro. «Esto se ve venir, es lo de siempre, y no hay planificación, sólo por falta de enfermeras, cerrarán camas, así que si Galicia marca la senda, síganla», insiste el especialista.
El caso de Sanxenxo, dice, «es una oferta generosa porque prevalece la sanidad para el ciudadano, por eso lo hacen», opina Miguel Lázaro. «Es una cuestión de priorizar necesidades, y aquí también las hay porque tenemos las clínicas privadas, pero están igual», argumenta. «No somos menos que Galicia». En Balears, la falta de especialistas de la sanidad pública no sólo afecta a los médicos de familia. De ahí que se solicite una planificación de los servicios. «Ahora, en Ibizaa, se han ido dos facultativos más», señala.
Las habitaciones de Ibiza
Lo que ya ha hecho la Conselleria de Salut es facilitar 26 habitaciones en Can Misses para profesionales sanitarios con contratos estivales y los acompañantes de pacientes de Formentera. Sin embargo, para los huéspedes se ha aprobado un decálogo en el que el primer punto pide un uso exclusivo de las habitaciones sin posibilidad de acompañantes, «ni tratándose de familiares de primer grado», señala el documento. «Quienes vengan, van a estar con un cinturón de castidad durante cuatro meses, vida austera y monacal», se quejan desde el Simebal. «Nos tratan como a temporeros, eso de progresista tiene muy poco», añade.