El año de las elecciones autonómicas será el de mayor inversión pública de la historia de Baleares y superará los 1.200 millones de euros entre las inversiones que realizará el Govern, las que harán las empresa públicas y las que harán otras administraciones gracias al dinero que les envíe el Ejecutivo. Se trata de una de las cifras más significativas del proyecto de Presupuestos para el año que viene, que ayer recibió el visto bueno del Consell de Govern.
El Presupuesto sumará finalmente 7.133 millones de euros, una cifra tampoco vista hasta ahora y que se alcanza gracias al espectacular aumento de la financiación autonómica, de casi un 25 % con respecto a este año, además de una subida de los ingresos tributarios derivada de la bonanza económica.
Buena parte de las inversiones ya están anunciadas y se corresponden con nuevas obras ferroviarias en Mallorca, como el inicio del proyecto del tren entre Manacor y Son Carrió, la construcción del tranvía de Palma, la puesta en marcha de la ampliación del metro hasta el Parc BIT, obras de construcción de vivienda, con un fuerte impulso en esta materia, y obras de construcción de residencias, incluida la remodelación de Son Dureta.
Más gasto social
Aumenta el presupuesto de las conselleries inversoras, como la de Medio Ambiente o la de Movilidad, pero a ellas se suman las previsiones de gasto en materia de agricultura, ganadería y pesca, en transición energética, innovación y comercio, industria y turismo. Todas estas áreas suman inversiones por valor de 754 millones, un 48 % más que este año.
El importante aumento en los ingresos permite al Govern invertir y, al mismo tiempo, profundizar en lo que el Ejecutiva llama el ‘escudo social', las ayudas a las familias más amenazadas por la subida del IPC y por las consecuencias de la guerra en Ucrania. El gasto social sumará el año que viene 4.069 millones de euros, un 14 % más que este año. Salud tendrá 2.233,8 millones; Educación, 1.135 millones; Servicios Sociales, 375,3 millones y las políticas de ocupación, 144 millones. A ellas se suman los casi 100 millones en vivienda, que el Govern incluye en este apartado del escudo social. El gasto en esta materia ha crecido desde los 2.307 millones de 2015 a los 4.096 de este año.
«Ponemos la maquinaria pública al máximo para sostener a la ciudadanía en momentos de incertidumbre», dijo la consellera d'Hisenda, Rosario Sánchez, encargada de presentar las cuentas tras su aprobación por parte del Consell de Govern «Hacemos más palanca que nunca con el resto de instituciones y el sector privado para que estos presupuestos tengan un efecto multiplicador en la economía», aseguró.
Inversión por islas
El gasto territorializado por islas varía en función de cada uno de los territorios: el Govern invertirá en Mallorca 904 millones (1.004 euros por habitante), otros 147,7 millones en para Menorca (1.536 euros por habitante), 166 en Ibiza (1.108 euros por habitante) y 25,2 millones en Formentera (2.107 euros por habitante).
Se sitúa en 1.004 euros por habitante en Mallorca, 1.563 en Menorca, 1.108 en Ibiza y 2.107 en Formentera.
También aumenta de forma muy significativa el dinero que recibirán los consells en concepto de financiación insular. En este aspecto también hay un récord, con una aportación global de 553 millones, un 29 % más que en 2022. Mallorca recibirá 392,4 millones de euros; Menorca obtendrá 71,5 millones del Govern, Ibiza sumará 77,8 millones y Formentera dispondrá de 11,4 millones de euros. Desde 2015, la financiación de los consells ha aumentado un 104 %.