Era plenamente consciente de que sus víctimas eran menores de edad. Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron el pasado lunes a un español, de 27 años, como presunto autor de un delito de agresión sexual y corrupción de menores. El arrestado, no dudaba en captar a las jóvenes por Instagram y después ofrecerles dinero para poder cumplir sus deseos sexuales en los baños de un centro comercial de Palma. Los agentes del Grupo de Delitos Tecnológico y Delincuencia Económica llevaron a cabo una investigación al objeto de esclarecer unos supuestos contactos con menores a través de una conocida red social a los que pedía imágenes de índole sexual para posteriormente quedar para mantener encuentros sexuales.
Una persona, de manera anónima, puso en conocimiento de la policía que conocía a un hombre que pagaba dinero a sus víctimas por tener sexo con él, contactando con ellas a través de Instagram. Los investigadores consiguieron localizar a varias víctimas, una de las cuales denunció que había tenido contacto con el sospechoso. Además, manifestó que en todo momento era consciente de que era menor de edad. A pesar de ello, el acusado insistió en solicitarle fotos y vídeos de índole sexual, llegando ésta a acceder a verse en los aseos de un conocido centro comercial.
Dentro de los aseos la menor, que tiene 14 años, le hizo una felación al hombre a cambio de dinero. El hombre intentó contactar en diversas ocasiones más con la víctima, a través de la red, pero ella decidió bloquearle. Con otra de las víctimas, llevó a cabo el mismo procedimiento, y tras entablar cierta amistad por internet, procedió a solicitarle imágenes de índole sexual, ante lo que se negó y lo bloqueó. Por tales motivos, los agentes ahondaron en las pesquisas y finalmente consiguieron identificar al presunto autor, procediendo a su detención el pasado lunes por un delito de agresión sexual y corrupción de menores.
La investigación sigue abierta al objeto de localizar más víctimas menores de edad. El acusado fue puesto este miércoles a disposición judicial. El magistrado de guardia ordenó su puesta en libertad con cargos y orden de alejamiento y comunicación con las víctimas. También se está analizando los terminales móviles del acusado.