Una funcionaria pública del Consell de Mallorca ha sido suspendida de sus labores durante cinco años y medio después de ser pillada por no ir a trabajar y fichar en otra empresa. La mujer, que contaba con un contrato interino, según detalla Última Hora, simultaneaba su trabajo en la institución con otro en una empresa privada.
El Consell, que sospechaba de la situación, contrató un detective privado para que la siguiera durante cinco días. En este sentido, la empleada iba a primera hora a su puesto en la institución insular y, tras fichar, se iba a la otra empresa. Cuando finalizaba la mañana volvía y fichaba su salida del trabajo público. Por este motivo, la institución abrió un expediente con tres faltas graves, según destaca el medio citado, y la mujer afirmó que estaba en los dos trabajo, aunque presentó alegaciones, como que no era necesario que estuviese todas las mañanas en su puesto de trabajo y que no tenía un horario establecido.
Finalmente, el Consell de Mallorca valoró que la trabajadora admitiese que trabajaba en dos sitios, pero reprochó no haber presentado suficientes pruebas donde justificase que cumplía su jornada. En paralelo, la trabajadora fue despedida de su puesto en la empresa privada y la representación alega que se cometió un delito de revelación de secretos por la sospecha de que el Consell facilitó datos personales o de la actuación del detective. Asimismo, el despido se recurrió ante los tribunales.
Parece ser que va a alegar MACHISMO porque solo le han pillado a ella y no a otro compañero varón, además de sentirse intimidada porque el espía que le seguía era un hombre.