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Antonio Isasi-Isasmendi, uno de los directores 'malditos' del cine español

Augusto M. Torres le incluye en su libro «Cineastas insólitos. Conversaciones con directores, productores y guionistas españoles»

Luis Berlanga abraza a Antonio Isasi al recibir el pasado año el premio Goya por toda su carrera. Foto: C. RIBAS.

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Bajo el título «Cineastas insólitos. Conversaciones con directores, productores y guionistas españoles» (Ediciones Nuer), el historiador y crítico cinematográfico Augusto Martínez Torres acaba de publicar un libro en el que analiza y reflexiona sobre figuras no convencionales, los considerados «malditos» del cine español. Entre los diez autores seleccionados figura Antonio Isasi -Isasmendi, residente en Eivissa desde que en 1988 abandonó por cansancio su fértil carrera en el séptimo arte. Los demás cineastas son Jesús Franco, Emiliano Piedra, Eduardo García Maroto, Pere Portabella, Jerónimo Mihura, Juan García Hortelano, José López Rubio, Manuel Mur Oti y Ricardo Franco.

Isasi se mostró ayer sorprendido por la aparición del libro. «No tenía ni idea de que lo estaba haciendo, me he llevado una sorpresa bastante grande. He hablado mucho con él de todo esto durante años, pero nunca me dijo que tuviera intención de hacer un libro; tengo mucha curiosidad por leerlo», explicó a Ultima Hora Ibiza y Formentera .

En cualquier caso, el cineasta no se considera a sí mismo un autor «maldito». «No sé qué sentido da Augusto a esa palabra, pero yo no me puedo considerar maldito. Quizás soy un director atípico, porque he hecho un cine comercial de calidad y muy competitivo, que entraba en primera línea de distribución de todas partes. Acaso por eso me considera un poco insólito, pues me salgo de la norma general del cine español», señaló. «Tres de mis películas se estrenaron en 40 cines de Nueva York, algo que no consiguió nunca ningún español; en poco tiempo he recibido diez homenajes, el último en Bilbao hace pocas semanas», añadió.

Por rarezas, Isasi consideró que en la lista de Torres hay cineastas que sí pueden considerarse «malditos», como Mur Oti, «que hizo unas películas estupendas y cuya obra no ha trascendido. O Jerónimo Mihura, a quien le monté alguna película. El que valía de verdad era su hermano Miguel, al que traté mucho. Y Jesús Franco, porque ha hecho muchas películas que han funcionado por ahí fuera, pero aquí en España no se le considera; igual que Portabella, que hizo un par de películas de las que nunca se habla», precisó.

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