El Ayuntamiento de Formentera y el Consell Insular subvencionan con un millón y medio millón de pesetas, respectivamente, una campaña arqueológica en la Cova de Sa Parra, situada junto a los yacimientos y a la muralla de Sa Cala, en la Mola. A la presentación de los trabajos acudieron ayer la consellera de Cultura, Fanny Tur, y el concejal de Cultura de la isla, Felip Portas. Esta iniciativa la llevan a cabo cuatro arqueólogos, Ricardo Marlasca, María Colomar, María José Escandell y José María López, que empezaron a trabajar el pasado lunes y estarán en la cueva hasta finales de mes.
Ricardo Marlasca, el responsable de los trabajos, explicó ayer que la campaña se inició el día 13 y «se engloba dentro de un proyecto a largo plazo en el que pretendemos hacer excavaciones tanto en la cueva como en la parte superior de la misma y en el llano de la Mola». Los primeros trabajos realizados consisten, según Marlasca, «en una estratigrafía larga, que en yacimientos del llano no podríamos hacer».
En este sentido, el arqueólogo señaló que «una cueva ofrece muchas más posibilidades a nivel estratigráfico por cuanto tiene de mayor potencial para la conservación de los elementos», añadiendo que con esta técnica «podremos establecer el orden cronológico de la ocupación de la cueva en base a los materiales que vayamos encontrando». Para el equipo de arqueólogos, «con el posterior estudio de la parte superior, al aire libre, obtendremos una comparación de la diversidad de los asentamientos de los pobladores de este lugar a través de la historia».
Para Marlasca, ha sido una sorpresa «descubrir que entre el siglo XVII, estrato que ya hemos estudiado y del que hemos extraído los restos hallados, y el estrato correspondiente a la época púnica, aproximadamente del siglo XX a.C., hay dos estratos totalmente estériles». Ello significa que «no hubo ocupación ni fija ni esporádica a lo largo de casi dos milenios». Agradeciendo las facilidades dadas por el propietario de la finca, Marlasca aseguró que sus esperanzas residen en los próximo estratos, ya que «bajo el periodo púnico esperamos hallar los niveles del 2000 al 1600 a.C., época que se corresponde con el yacimiento superior al aire libre y con la muralla».