Según estaba previsto en el Pla Insular de Gestió del Patrimoni Històric-Artistic, aprobado en el pleno de febrero de 2001, la Conselleria de Cultura encargó el pasado año la restauración de la tabla «La Santa Generació», que será presentada al público la semana que viene. Original del siglo XVI, la obra es atribuida al «mestre de Calvià», aunque algunas fuentes afirman que pertenecía al desaparecido «Retaule de Santa Anna», teoría no suficientemente contrastada todavía, según informa Nieves Peinado Sala, restauradora de la tela. El ebanista José Ferrer Planells se encarga del tallado de los elementos del soporte de la tela, mientra que los estudios estratigráficos de pintura y soporte, necesarios para obtener la información necesaria para la documentación histórico-artística de la obra, han sido realizados por Rafael Romero Ajenjo.
El delicado estado de conservación de «La Santa Generació» recomendaba una pronta intervención, debida a ataques de insectos y a las deficientes condiciones de embalaje y tratamiento de la obra. Sin embargo, las alteraciones más graves y evidentes eran los importantes levantamientos de la pintura, que comenzaban a ocasionar el desprendimiento y la pérdida de fragmentos de la misma. Esta falta de adhesión entre el soporte de madera y la pintura se debían sobre todo a los travesaños rígidos de la parte posterior de la obra, que imposibilitaban los ligeros cambios dimensionales propios de la madera.
Por dicho motivo, la intervención más importante ha estado centrada precisamente en el soporte de la tela, que después de la aplicación de un tratamiento preventivo contra los insectos, ha sido objeto de un laborioso trabajo consistente en empalmes de maderas de distinta dureza para proporcionar a la obra un nuevo sistema de sujección: unos travesaños móviles que permitirán los cambios naturales de la madera e imposibilitarán nuevos levantamientos y alteraciones de la policromía.
Tras el tratamiento del soporte de la tabla de «La Santa Generació», Nieves Peinado Sala ha realizado la adhesión de la pintura, completando la restauración de la obra con la limpieza, estucado y reintegración de color, de acuerdo a los criterios de visibilidad y reversibilidad que exigen este tipo de intervenciones. Una vez concluida la restauración de esta tabla, Nieves Peinado y el ebanista Vicent Guasch Morer iniciarán la del retablo de la Soledad, también de la Catedral de Eivissa.