Las obras de rehabilitación que está realizando el Ayuntamiento de Eivissa Dalt Vila han permitido la localización de una cisterna púnica y una lápida romana de la época del Alto Imperio de cuyo hallazgo el Consistorio informó ayer a la Conselleria de Patrimoni.
El primero de los hallazgos se produjo en las obras de rehabilitación del edificio de Can Botino, que acogerá dependencias del Ayuntamiento y del Consell. Se trata de una cisterna excavada en la roca que apareció durante las excavaciones del jardín, en la parte más cercana a la calle Pere Tur, en la zona donde estaba prevista la instalación de un generador de GESA. Tras el descubrimiento se paralizaron los trabajos y se procedió a la limpieza y vaciado del depósito, en cuyo interior se encontraron algunos restos cerámicos de época antigua y medieval, pero al parecer la cisterna quedó inutilizada cuando se construyó Can Botino. Una vez acabados los trabajos de excavación y documentación, los técnicos del Ayuntamiento proponen la continuación de la obra porque la conservación del depósito sólo se vería parcialmente afectada, puesto que es necesario rebajar quince centímetros más el terreno para colocar los cimientos.
En cuanto a la lápida encontrada en la Casa de la Curia, se trata de una losa reutilizada que se ha hallado en la base de la torre XVI, en la esquina norte. La cara de la inscripción se encuentra en parte a la vista, aunque no puede apreciarse completamente porque un muro medieval cubre parcialmente la leyenda. Por las letras y los nombres legibles, y a falta de que se pueda completar el área de texto, los técnicos considera que no es una lápida funeraria y recomiendan mantenerla in situ debido a su ubicación, siete metros por debajo de la cota del vestíbulo de la casa.
El conseller de Patrimoni, Joan Marí Tur, explicó ayer que la lápida forma parte de la base de la fortificación medieval que pasa junto al edificio de la Casa de la Cúria. «No corre peligro por estar parcialmente tapada por otro muro. La parte de la inscripción visible es muy mala de leer en fotografías, pero parece que hay un nombre propio ligado con la tribu Quirina y con otros personajes célebres de la época de Ebusus. En cualquier caso, y según la opinión del doctor Ramon (responsable del área de Arqueología del Consell) es una pieza importante para la historia de Eivissa».
Marí Tur explicó que la utilización de la lápida romana para construir un edificio de la época medieval era práctica habitual en la época. «Era normal en los sitios con un pasado histórico importante que se aprovecharán restos arqueológicos para hacer los edificios nuevos», precisó.
En cuanto al proyecto de rehabilitación de Can Botino, el conseller de Patrimoni informó que el alcalde de Eivissa, Xico Tarrés, le había remitido el informe de la técnica de Patrimonio del Ayuntamiento sobre el hallazgo de la cisterna púnica, que ha provocado la suspensión de las obras en espera de la valoración de la Comisión de Patrimonio. «El viernes tendremos la respuesta sobre la continuación de las obras en Can Botino y sobre lo que se debe hacer con la lápida romana», puntualizó Marí Tur.
Además, el conseller dijo que había recibido de una persona «un dossier fotográfico mostrando su disconformidad con estas obras; y hace unos días también apareció un escrito de un arquitecto en la prensa en contra de estas obras, que están denunciadas en la Unesco y en el propio Ayuntamiento. De todas formas, estoy seguro que se hacen de acuerdo con el proyecto aprobado y con la normativa vigente; y en cualquier caso, la responsabilidad directa es del Ayuntamiento», concluyó.