María Trinidad Pérez de Miravete Mille, conocida como Mari Trini, falleció ayer en Murcia a los 61 años, tras una larga enfermedad. Fue una de las voces españolas más escuchadas y populares en los 70 y 80, aunque siguió grabando hasta 2001. La discografía de Mari Trini suma 30 trabajos y 300 canciones, con más de 10 millones de discos vendidos a lo largo de su carrera. Ya a la edad de 15 años, se fue a Madrid con la esperanza de triunfar en el mundo de la canción. Allí tuvo la suerte de conocer al director de cine Nicholas Ray, persona que se encargó de guiarla.
Posteriormente, se trasladó a París, lugar en donde comenzó su carrera profesional, y obtuvo sus primeros resultados. Logró su primer contrato con la EMI francesa, y compuso hasta 12 temas en francés. Tras cinco años hasta que finalizó su contrato, regresó para probar suerte en su tierra de origen. A su llegada a España grabó su primer trabajo en español, que incluye temas de autores como Luis Eduardo Aute, Juan Carlos Calderón y Patxi Andión, además de algunas composiciones propias, pero no fue hasta el siguiente disco, Amores cuando logró la verdadera fama, permaneciendo un año en las listas de ventas. Enlos años siguientes confirmó su especial estilo con temas como Yo no soy esa o Una estrella en mi jardín.
Compaginó su trabajo en España con la grabación de adaptaciones de sus canciones en francés. Participó en el Festival de la Canción Española, que en 1975 se celebró en Mallorca. Allí estrenó temas como No te preocupes amor. El éxito la hizo estar medio año entre los superventas en español.
A principios de 1976, Mari Trini comenzó una gira por varios estados de habla hispana, ya que sus discos se lanzaron en esa época por más de 20 países, entre ellos gran parte de Latinoamérica. A mediados de los 70 comenzó a aproximarse a las tendencias de la música pop de aquel momento. En 2001, grabó un disco con el trío Los Panchos, que fue el último de su discografía. El pasado año, en los Premios 8 de marzo 2008 de la Región de Murcia, la popular artista recibió el título de la 'Mujer Murciana', en reconocimiento por distinguirse de forma eminente en cualquier ámbito de la vida social, cultural, política o económica. Ese día dijo estar feliz y contenta, porque «significa mucho para mí, pero queda mucho camino por hacer».