El pintor Laureà Barrau formará parte de la exposición que, con motivo del IV centenario de la muerte de El Greco, se podrá visitar en Barcelona (C/Diputación, 250) desde el próximo 3 de diciembre y hasta el 2 de febrero. ‘El Greco, la mirada de Rusinyol' está organizada por la Fundación Francisco Godia juntamente con el Consorcio de Museos de Sitges y La Caixa, que llevará posteriormente la exposición a Palma de Mallorca y a Zaragoza, según informaron desde la Fundación.
La muestra da el papel fundamental al artista Santiago Rusinyol, «quien realizó una gran tarea de difusión de la figura de este artista a quien propuso como el primer abanderado de la modernidad», explicaron des de la Fundación. En este sentido, el trabajo de Barrau ayudaría «a la hora de definir los principales objetivos de la muestra, que son ofrecer una nueva luz sobre la relación artística e intelectual que supuso el encuentro y la revalorización de las obres de El Greco por parte de los coleccionistas en Cataluña y por parte de Santiago Rusinyol y de otros artistas de su generación», apuntaron.
El pasado mes de octubre, en una presentación de una exposición en el Museo Thyssen de Málaga, la directora artística del museo, Lourdes Moreno, recordó que en el año 1893 Rusinyol se encontraba en París y supo que en casa de Barrau había dos obras de El Greco y el taller donde trabajaba, que habían sido dipositadas por el industrial Pau Bosch, cuadros que finalmente adquirió Rusinyol.
Seguramente, este contacto directo despertó cierto interés en Barrau quien, años después firmaría la copia de ‘Cavaller ancià' del pintor de origen griego, un óleo sobre tela que ahora se cede y que forma parte del legado dejado por el pintor a la parroquia y restaurado recientemente por el Ayuntamiento de Santa Eulària des Riu.