La líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha destacado la «generosidad» de la quincena de fuerzas de izquierda, incluida Podemos, que suscribieron el acuerdo de coalición para concurrir juntos a las elecciones del 23J y ha zanjado la polémica por la no presencia de Irene Montero en las listas. «Dejemos de hablar de nosotras mismas. La gente lo que quiere es que hablemos de propuestas», ha enfatizado en declaraciones a 'La Sexta' para recalcar que otras personas como la exalcaldesa de Barcelona Ada Colau, el líder de IU, Alberto Garzón, el coordinador de Alianza Verde, Juantxo López Uralde, o el dirigente de los 'comunes Jaume Asens, todas ellas también «valiosísimas», no van en listas.
En este sentido, la también vicepresidenta segunda ha enfatizado que se siente «orgullosa» de la labor de Montero al frente de Igualdad, como en materia de derechos feministas y la comunidad LGTBI, aunque ha resaltado que los proyectos son «colectivos». Por tanto, ha defendido que las bases progresistas demandaban ese acuerdo «ancho» a la izquierda del PSOE, que se logró en «tiempo récord» por el adelanto electoral y, al respecto, no tiene más que «gratitud» y «alegría» por un pacto suscrito por todos, que la opción de «éxito» para revalidar un gobierno progresista reside en Sumar.
También ha defendido que la irrupción de su candidatura está cambiando el panorama electoral, como reflejan ya las encuestas, y detecta que hay otro escenario respecto al de otros sondeos pasados, que daban más opciones de gobierno al PP y Vox. Es más, ha proclamado que mediante a propuestas como la reducción de la jornada laboral la ciudadanía progresista se está movilizando y ha resaltado la importancia de atraer a los indecisos, dado que un 30% del electorado decide su voto en la última semana de la campaña electoral.
Por otro lado, Díaz ha reafirmado que no comparte en absoluto las palabras del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuando criticó en alusión a Montero discursos feministas «incómodos» y sobre la «confrontación», que ha tildado de «muy inadecuado». En este sentido, ha alertado de que la opción de un gobierno de PP está dispuesto a gobernar con Vox, que apuesta por «pisotear» los derechos de las mujeres, y ha acusado al líder popular, Alberto Núñez Feijóo, de «legitimar» la «violencia» y el «maltrato» a una mujer, cuando habló de «divorcio duro» al ser preguntado en una entrevista por el dirigente de Vox en la Comunidad Valenciana Carlos Flores, condenado por violencia de género. De hecho, Díaz ha censurado que Feijóo ha tenido ocasiones para disculparse y corregir sus palabras y no lo ha hecho.
Respecto a Cataluña, ha insistido como viene haciendo estos días su equipo que el programa de Sumar recogerá únicamente una consulta en Cataluña sobre el acuerdo que alcance la mesa de diálogo, porque son partidarios de que los catalanes voten un pacto «amplio». A su vez, ha recalcado que la cuestión del derecho a decidir era un postulado que ya no aparecía en el último programa de En Comú Podem y que el tiempo tras el 'procés' ha pasado para «todo el mundo», para luego resaltar que la posibilidad de un gobierno entre PP y Vox no mejorará las relaciones entre España y Cataluña.
También está convencida de que la derecha no ganará las elecciones y, cuestionada sobre si se abstendría para dejar gobernar al PP en solitario, ha dicho que es clara porque las política y las alianzas se basan en programas con los que se ha de coincidir, deslizando así que descartaba esa opción. En cuanto a la posición respecto al Sáhara Occidental, Díaz ha afirmado de forma clara que defenderán la misma posición de «siempre», el derecho de autodeterminación de los saharauis en los términos que marca la ONU y que todas las personas que integran su lista están en ese postulado, incluido el diplomático Agustín Santos.
Respecto a Marruecos, Díaz ha aseverado que defenderán el avance de los derechos humanos en el país vecino, pues es una materia que «no se puede relativizar». Mientras y en relación a la guerra de Ucrania, Díaz ha apostado por el cese a la invasión «ilegítima» de Rusia hablando de paz mediante las vías diplomáticas, aunque ha insistido que ante una vulneración de la normativa internacional de esa magnitud pueblos como el ucraniano tiene el derecho a la legítima defensa.