El dueño de un almacén de quesos Grana Padano de la localidad italiana de Romano di Lombardia, en Bérgamo, ha muerto tras quedar sepultado por unos 15.000 quesos que le cayeron encima el domingo cuando se encontraba trabajando.
Los servicios de rescate han confirmado este lunes que tras una larga búsqueda han encontrado el cuerpo sin vida del hombre, de 74 años, que se encontraba debajo de las ruedas de quesos que cayeron junto con las estanterías haciendo un efecto dominó, según informaciones del diario 'Corriere della Sera'.
El incidente se produjo el domingo por la noche cuando una de las estanterías colapsó y provocó la caída de los alimentos por causas aún sin especificar. En total, el almacén consta de una decena de pasillos con unos 1.600 quesos en cada uno.
El estruendo del derrumbe puso en alerta al propio hijo del dueño, así como a otros trabajadores, que llamaron a los servicios de emergencias.