El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, ha pedido este sábado a su partido que cierre filas en torno a Alfredo Pérez Rubalcaba y que, una vez sea proclamado candidato, salgan a defenderle «de las críticas, ante los periodistas, ante los amigos», sin ceder «un ápice de terreno».
«Es la persona que quieren nuestros compañeros y nuestros votantes, es querido y apreciado por los nuestros, respetado por los adversarios y temido por algunos, por los terroristas de ETA, y sé bien de lo que hablo», ha manifestado.
Ante el Comité Federal del PSOE, máximo órgano del partido entre Congresos, Zapatero ha comunicado el deseo «unánime» de todos los 'barones' del PSOE de que Rubalcaba sea candidato en 2012, y ha pedido a todos una «unidad» que, a su juicio, el PSOE tiene «al alcance de la mano».
«Hagámosle todo lo fuerte que podamos porque su fuerza es nuestra fuerza, es la fuerza de nuestro proyecto y la capacidad de recuperar una mayoría social en las próximas elecciones», ha remarcado. De hecho, ha recordado que las victorias que ha tenido el PSOE han sido fruto de un proyecto político pero también de la «unidad» y la «cohesión».
En la misma línea, ha pedido a todo el PSOE «generosidad» como ha tenido la ministra de Defensa, Carme Chacón, que el jueves anunció que se retiraba de la carrera sucesoria. «Agradezco su actitud y su valía», ha señalado, apostillando que a él le gusta «hablar bien de todos los compañeros».
Rubalcaba le escuchaba varias filas detrás de él, en la última fila de la grada reservada a la Ejecutiva Federal del PSOE, serio, sin cambiar el gesto. A su lado se sentaba Chacón --las cámaras no la han enfocado en ese momento--, pero antes de iniciarse la reunión se ha visto como la ministra evitaba hablar con él, girada hacia su otro vecino, el vasco Rodolfo Ares.
Zapatero ha definido a su vicepresidente como un «sprinter», convencido de que «alguien que corre 100 metros en poco más de 10 segundos es capaz de ganar en 10 meses unas elecciones». Incluso ha finalizado su intervención dirigiéndose a él y convencido de el PSOE puede ganar las próximas generales:» *Por qué no en 2012, Alfredo, por qué no en 2012? Yo creo que sí Alfredo, que podemos hacerlo en 2012».
El líder socialista no ha pronunciado hoy la palabra «primarias», y sólo ha señalado que los 'barones' han expresado su «deseo» desde el «respeto al proceso democrático». Además, ha apuntado la posibilidad de que, si así lo decide el Comité Federal, hoy mismo se formule la propuesta de que Rubalcaba sea el candidato.
Los ciudadanos «exigen que lo cerremos cuanto antes»
Según Zapatero, el PSOE debe mostrar «unidad» que piden los ciudadanos: «Nos exigen que lo cerremos cuanto antes y nos volquemos en la economía y el empleo y lo vamos a hacer y nos exigen generosidad y la vamos a tener».
Y, de Rubalcaba, ha considerado que «es capaz de generar toda la confianza y responsabilidad» que necesita el PSOE, y que así lo acreditan las responsabilidades que ha ido asumiendo.
Por otro lado, el jefe del Ejecutivo ha confirmado que el PSOE celebrará una conferencia política para fijar las bases de su programa para 2012, porque «la socialdemocracia que gana es la que es capaz de renovar su proyecto».
Autocrítica, no más de la merecida
«Ahora toca que hagamos toda la autocrítica necesaria, pero no más de la necesaria ni de la que merecemos, los ciudadanos que nos han votado y los que no nos han votado pero que nos pueden votar en las generales están pendientes de qué les decimos a ellos, no de qué nos decimos entre nosotros»
Ante la conferencia política, ha recalcado que el deber de los socialistas es «defender el interés general» aunque esa tarea exija «sacrificios, incluso pagar algún precio alto» como ha sido «perder poder, retroceder seriamente en apoyo electoral» como le ha sucedido al PSOE en las últimas autonómicas y municipales.
Eso sí, ha recordado a los suyos que el auténtico «sacrificio» y «mal momento» es el que vive la gente que está en paro y les ha llamado a renovar el proyecto para evitar que en España haya una «generación perdida», para «asumir los cambios» apostando por la igualdad de oportunidades y de solidaridad. Y además, les ha agradecido su «coherencia» y su «lealtad» aplicando la política del Gobierno: «Podéis tener siempre la convicción de que es lo que teníamos que hacer».