Casi 4.000 efectivos de todo tipo participarán en el dispositivo de seguridad de partido de fútbol de la final de la Copa Libertadores que se celebrará este domingo en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid, uno de los mayores operativos policiales de este tipo de la historia.
Según detallaba este viernes el delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Rodríguez Uribes, de ellos 2.054 serán policías nacionales, la mitad llegados de fuera de la región, 150 policías municipales para tareas de seguridad, 1.700 vigilantes de seguridad del Real Madrid y 70 efectivos de Samur y 80 de Cruz Roja, así como personal de Protección Civil, y de la Federación Española de Fútbol, entre otros.
Del montante de policías nacionales, participarán agentes de las Unidades de Intervención Policial, más conocidos como antidisturbios, Unidades de Prevención y Reacción, Guías Caninos, Subsuelo, radiopatrullas, helicópteros y miembros de la Oficina Nacional del Deporte. Se establecerá un Centro de Coordinación Permanente (CECOR) en la Jefatura Superior de la Policía, que estará operativo todo el día, y otro en el estadio madridista.
PROHIBICIÓN DE CIRCULACIÓN DE VEHÍCULOS PESADOS
Tras el análisis de riesgo, los mandos policiales han decidido limitar la circulación a vehículos pesados de más de 3.500 kilos en las inmediaciones del Estadio Santiago Bernabéu, entre la medianoche del sábado y la medianoche del domingo.
Asimismo, se han habilitado las denominadas 'Fan zone' para los seguidores de ambos equipos. Se trata de amplios espacios donde se ubican carpas, zonas de relax, talleres, actividades y atracciones diversas. El Ayuntamiento de Madrid ha determinado la instalación de estas áreas en dos espacios situados, en el caso del River Plate en la zona norte del Paseo de la Castellana, entre Plaza de Castilla y la Plaza de Cuzco y en el caso del Boca Juniors en la zona sur del Paseo de la Castellana junto a la sede del Ministerio de Fomento y la Plaza de San Juan de la Cruz.
Como en otras ocasiones, se instalarán controles en los accesos a estas zonas con el fin de evitar la introducción de elementos punzantes, vidrios y otros objetos en estos puntos de concentración de seguidores, para evitar problemas de orden públicos.
RECOMENDACIONES
Con el fin de evitar aglomeraciones innecesarias, la Delegación del Gobierno aconseja acudir con tiempo al estadio, no olvidar en DNI, NIE o pasaporte en regla, seguir las indicaciones en los controles de acceso. También que los aficionados acudan en transporte público para acceder al estadio y su entorno y se pide a los aficionados que disfruten el partido y respeten a todos.
Rodríguez Uribes ha recordado a los aficionados que la Ley del Deporte prohíbe la introducción en el interior de cualquier recinto deportivo de bebidas alcohólicas, armas e instrumentos susceptibles de ser utilizados como tales, bengalas, fuegos de artificio u objetos análogos. La introducción y exhibición de pancartas, entonación de cánticos, símbolos, emblemas o leyendas que impliquen incitación a la violencia, terrorismo, racismo, xenofobia o intolerancia en el deporte, también está prohibido.
Además se prohíbe también el acceso a todos aquellos espectadores que porten bebidas alcohólicas, estupefacientes, psicotrópicos, estimulantes o sustancias análogas o se encuentren bajo sus efectos. La introducción en el interior de las instalaciones deportivas de bebidas, envases o demás artículos de metal, vidrio, cerámica, madera o materiales similares que superen en volumen/peso más de 500 ml/mg.
Igualmente está prohibido introducir en ningún recinto deportivo objetos voluminosos, carritos de niño u otros objetos que pudiesen constituir un obstáculo en caso de evacuación. «Tenemos una ley del Deporte muy exigente, afortunadamente, que combate la violencia y la apología de la violencia. Y más allá de las particularidades, no deja de ser un partido más de algo riesgo», ha concluido Rodríguez Uribes.