Te sientes culpable porque, aunque todo parece estar bien, no eres del todo feliz? ¿No eres tan feliz como los demás esperan o como creías que serías? A lo mejor te cuesta admitirlo y lo guardas para ti, intentando seguir como si nada. Pero al final del día, sientes que algo no va bien y te preguntas por qué no te sientes feliz…
¿Te cuento un secreto?
LA FELICIDAD ES UNA ELECCIÓN, Y TÚ TIENES EL PODER DE DECIDIR SER FELIZ O NO.
¿Qué eliges?
Si tu elección es ser feliz ¡Sigue leyendo!
El primer paso es reconocer como te sientes y hacia donde quieres avanzar. A partir de ahí, puedes empezar a trabajar en tus pensamientos, actitudes y comportamientos. Si me lees cada domingo y lo practicas, seguro que vas entendiendo que nosotros y solo nosotros, somos los creadores de nuestra propia vida, de nuestra realidad y, por tanto, somos nosotros los que elegimos ser felices o no serlo.
¡EL PODER ESTÁ EN TI!
Y para llegar a este punto es importante un trabajo mental, corporal y espiritual que te llevará a:
Una transformación interior
Otra forma de entender la vida
Disfrutando como deseas
Desde el momento presente
Con calma y serenidad
Conectado con quién eres en esencia
¿Por dónde empezar?
DEJA DE PRESUPONER. Nunca sabes lo que te va a suceder y, sin embargo, tu mente imagina un futuro inexistente. ¡Libérate de ella, avanza y descubrirás lo que realmente te está esperando! No dejes que tu mente lo haga por ti y te frene. (Te recomiendo leer el libro «Los cuatro acuerdos» de Miguel Ruiz y «El poder del ahora» de Eckhart Tolle).
PERMITE QUE LA VIDA TE SORPRENDA. Está bien tener ciertas cosas organizadas, pero deja un espacio para la improvisación y para que el Universo te regale eso que tiene preparado para TI.
BUSCA TIEMPO PARA ESTAR SOLO, contigo mismo, sin estímulos externos, sin móvil, ni TV, ni libros. Te darás cuenta de cómo realmente te sientes y lo que necesitas.
PRACTICA LA GRATITUD. La gratitud vibra en una frecuencia alta y agradecer cada día abrirá para ti muchas oportunidades porque estás expandiendo tu conciencia. Puede ser un buen momento para comenzar con tu diario de agradecimientos. Escribe diez agradecimientos diarios antes de acostarte y termina con «gracias, gracias, gracias». Piensa en ellos antes de dormirte en vez de irte a dormir con tus problemas.
NO TEMAS AL FRACASO. Al conocimiento interno solo se llega con la experiencia de vivir y equivocarse. Si haces algo bien a la primera, tu ego estará dando saltos de alegría. Pero es posible que no hayas aprendido nada. Por eso, si quieres crecer, equivocarte es una parte importante del proceso.
REVISA TU EQUIPAJE y descubre el peso que te sobra. Deja de cargar con lo pasado, con lo que ya no te sirve y deja espacio para que entre lo nuevo y tu vida se transforme.
ACÉPTATE Y ÁMATE tal y como eres. No te juzgues continuamente. Y si hay algún comportamiento de ti que no te gusta, tienes el poder de soltarlo y cambiarlo por otro que te haga sentir mejor.
NO TE MACHAQUES si no llegas al objetivo que te has propuesto. Piensa en todo lo que has aprendido en el camino
HABLA EN POSITIVO. Revisa tu forma de expresarte y haz pequeños cambios en el mensaje para que sea más motivador y no te limite. Por ejemplo, en vez de decir «no puedo hacerlo», piensa «quiero hacerlo y sí que puedo, pero me va a llevar un tiempo lograrlo». Te invito a leer el artículo de hace unas semanas que habla sobre este tema.
RELACIONES SIGNIFICATIVAS. Rodéate de personas positivas que te aporten y sumen en tu vida. Esto puede suponer soltar otras que no te están dejando avanzar… ¡Es tu elección!
DEJA DE QUEJARTE Y DE CRITICAR. Hacerlo baja tu frecuencia vibratoria y recuerda… Atraes lo que vibras. ¿Qué deseas atraer?
SONRÍE Y ABRAZA MÁS A MENUDO. El mero hecho de sonreír nos hace sentir mejor, a nosotros y a quienes nos rodean. Los abrazos son una expresión poderosa de amor y conexión.
APRENDE A DISFRUTAR DE LAS «PEQUEÑAS»-GRANDES COSAS de la vida: el paisaje que te rodea, la caricia de la brisa o el sol, la ducha matutina… Damos por hecho que siempre están ahí. ¿Te imaginas cómo sería nuestra vida si no estuvieran?
MAÑANAS PODEROSAS. Comienza tu día con un ritual que te haga sentir bien, poderoso y creador de tu vida, en vez de corriendo y estresado desde primera hora. Te comparto el mío: cada mañana madrugo para meditar y visualizar mi día y la vida que estoy construyendo, hago yoga y ejercicios de fuerza, leo y preparo mi infusión favorita. Esto me lleva 90 minutos aproximadamente y te aseguro que influye directamente en cómo vivo y disfruto de mi día a día.
COME SALUDABLE Y CUIDA TU CUERPO. Tu cuerpo es tu templo; cuidarlo, amarlo y respetarlo te lleva a vivir en equilibrio.