El paso del tiempo nos alcanza a todos, sin opción a esconderse. El envejecimiento, sin embargo, puede darse de muchas maneras. La ciencia coincide en diez trucos que lograrán que toda persona cumpla años con buena salud, reduciendo los síntomas de la vejez.
1. El sueño
Una buena noche de descanso alivia la carga física y emocional. Asimismo, el sueño es vital para consolidar un buen sistema inmunológico, así como tener una gran memoria.
2. Actividad física
Hacer ejercicio mejora aptitudes como la fuerza, la flexibilidad o la actividad cardiovascular, lo que previene enfermedades como la diabetes o la obesidad. A su vez, la actividad física libera la mente, lo que se relaciona con el siguiente punto.
3. Reducir el estrés
Mantener la mente abierta a experiencias es una buena manera de bajar los niveles de ansiedad, tan nocivos para la salud. El estrés psicológico provoca enfermedades, como la depresión, respuestas hormonales erróneas y falta de descanso, acelerando el envejecimiento.
4. La dieta
Alimentarse de forma saludable aporta los nutrientes necesarios para tener energía a lo largo de toda la jornada. Los procesados, bajos en nutrientes y altos en calorías, son perjudiciales. Se debe abogar por los productos frescos y las dietas equilibradas.
5. Dejar de fumar
Fumar reduce la capacidad del cuerpo para sanar y regenerarse. Asimismo, propicia enfermedades crónicas como el cáncer.
6. Controlar el consumo de alcohol
Los expertos señalan que no hay cantidad de alcohol saludable, ni siquiera de vino. El consumo excesivo daña los órganos y ayuda a que surjan trastornos neurodegenerativos como la demencia.
7. Mantener un peso saludable
La obesidad y el sobrepeso incrementan el riesgo de muerte hasta un 91%. Controlar el peso corporal y mantener una cifra saludable ayuda a envejecer con energía y sin problemas.
8. Nunca dejar de aprender
Los estímulos cognitivos reducen el riesgo de sufrir enfermedades neurodegenerativas, manteniendo la mente en forma.
9. Tener buena vida social
Las buenas compañías mejoran los hábitos de vida. Tener hombros en los que apoyarse reduce el estrés y la sensación de pertenencia y el arraigo hacia un grupo ayuda a prevenir la depresión o la soledad.
10. La importancia de la adaptación
Saber aceptar los reveses de la vida, recomponiéndose con habilidad, es un marcador infalible para que el paso del tiempo no pase factura en cuerpo y mente.