Todos tenemos una zona de confort donde estamos acomodados. El que se llame zona de confort no quiere decir que sea una zona cómoda, si no una zona que conocemos y controlamos. Te pongo unos ejemplos:
- Puede ser una relación con tu pareja en la que discutes habitualmente. Es una situación no te hace sentir bien, sin embargo, sigues ahí, acomodado, sin hacer nada para mejorarla o cambiarla, te has habituado a vivir así. Y aunque no te guste, tampoco haces algo diferente que te ayude a vivir esa u otra relación con pasión...
- Puede ser un trabajo aburrido y rutinario, que no te aporta, ni te permite desarrollarte como persona. Pero no haces nada por cambiarlo, sigues ahí, apalancado...
- Puede ser cualquier rutina que no te llena y hace que tus días sean como el día de la marmota. A pesar de eso, estás ahí...viendo la vida pasar...
- Pueden ser relaciones que mantienes por costumbre, que te desgastan y agotan tu energía, pero...continúas con ellas...
Esto es la zona de confort, una zona conocida para ti, porque sabes lo que te va a suceder, pero de cómoda no tiene nada.
Entonces ¿Qué es lo que sucede? ¿Qué te hace mantenerte en esta zona? ¿Por qué no te atreves a salir de ella o a ampliarla?
CONTROL
Hay quien quiere tener todo controlado, lo contrario le genera estrés y ansiedad. Enfrentarte a una situación nueva significa perder el control de lo que estás haciendo, pues es algo que no conoces.
Mantenernos en la zona de confort es engañarnos a nosotros mismos, porque no podemos tener todo controlado, debemos vivir y superar lo que nos perturba.
MIEDO AL CAMBIO
Todo en la vida es cambio, no podemos mantenernos siempre igual y para ello hay que correr riesgos. Si percibes todo como algo peligroso, entonces no vivirás y si construyes un muro a tu alrededor no te protegerá, te aislará. Debemos superar esos miedos, y aprender a percibir la vida como algo positivo.
Podemos regresar a nuestra zona de confort cuando lo necesitemos, a buscar los recursos que nos hacen falta y que tenemos allí guardados, para enfrentarnos a nuevos retos, situaciones y cambios.
Y en este viaje no todo son éxitos, pero es un riesgo que hay que correr y asumir. Es el peaje que hay que pagar para evolucionar. Los fracasos no son fracasos, son aprendizajes que nos permiten crecer personalmente.
Por eso, desde mi experiencia, puedo darte muchos motivos para que salgas de tu zona de confort:
SUPERARÁS TUS MIEDOS: PASARÁS DE PANTALLA
Los miedos nos paralizan y no nos dejan avanzar, no nos dejan pasar de pantalla. Es normal sentir vértigo ante lo desconocido y lo que no podemos controlar. Pero si queremos vivir de forma plena no podemos dejarnos atrapar por el miedo. Sabemos que esto nos puede hacer vivir experiencias quizás incómodas, pero forma parte de nuestro aprendizaje y desarrollo personal. No se puede evitar, pero si aprender a gestionarlo y ver los fracasos como un aprendizaje.
CAMBIARÁS TU FORMA DE PENSAR: MENTE RÍGIDA VERSUS MENTE FLEXIBLE
Las personas que se resisten al cambio suelen tener una mente totalmente rígida. Al estar siempre alerta los niveles de estrés se elevan y esto dará paso a la ansiedad. Una mente flexible te permitirá estar abierto a nuevas experiencias y aunque corras algunos riesgos, empezarás a ver la vida como un lugar donde aprender y experimentar y de esta forma serás capaz de exprimir la vida al máximo. ¡Forma parte del juego! Y como siempre te digo, esto se entrena cada día en el campo.
MEJORARÁ TU AUTOESTIMA, APRENDERÁS A RELACIONARTE Y AUMENTARÁ LA SEGURIDAD EN TI MISMO
Cuando queremos avanzar, y sin embargo nos mantenemos en nuestra zona de confort, no podemos valorarnos porque no somos capaces de hacer frente a lo que nos asusta. Esto nos hace sentirnos frustrados, lo cual afecta a nuestro estado de ánimo.
Sin embargo, cuando somos valientes y abrimos la puerta al cambio, nos sentimos mejor con nosotros mismos, nuestra autoestima crece y estamos en paz.
La zona de confort es un lugar frío y sombrío y no podemos vivir ahí eternamente porque nos aislaríamos. Salir de esta zona es conocer gente nueva y experimentar el enriquecimiento personal que nos aportan.
Quien es capaz de abandonar su zona de confort, es capaz de cualquier cosa. Tener la capacidad de afrontar todo lo nuevo, no como una amenaza, sino como una oportunidad, nos enriquece, nos hace más fuertes y aumenta la seguridad en nosotros mismos.
ADQUIRIRÁS NUEVAS HABILIDADES
La vida es aprendizaje y la zona de confort solo sirve para estancarnos emocionalmente. Al salir de ella nos enfrentaremos un mundo donde necesitaremos desarrollar nuevas habilidades que nos ayuden a desenvolvernos, lo cual es emocionante y enriquecedor ¿no te parece?
SERÁS LIBRE EMOCIONALMENTE
La independencia emocional es algo maravillosamente gratificante. Por ello te animo a dar un salto de fe porque al otro lado de la puerta vas a encontrar una vida sin limitaciones personales. ¿Quieres ser libre?
QUERRÁS VIVIR NUEVAS EXPERIENCIAS Y DISFRUTAR LA VIDA AL MÁXIMO
¿Sientes que tu vida es rutinaria, aburrida y que no ocurre nada nuevo? Eso es porque está en tu zona de confort. Si decides dejarla atrás, entonces querrás vivirlo todo, sin miedos y al máximo.
DISFRUTARÁS DEL AQUÍ Y AHORA
¿Estás siempre pendiente de qué ocurrirá si…hicieras, y por eso no lo haces? Tus miedos no te dejan salir de tu zona de confort y estás proyectando tus dudas en un futuro y sin embargo, es muy posible que todo lo que piensas jamás ocurra. Esto hace que tu vida no sea espontánea impidiéndote disfrutar del aquí y ahora.
Si estás atrapado en tu zona de confort, no sabes cómo salir de ella y necesitas ayuda, te acompaño en tu proceso de evolución personal.
Puedes encontrarme en hola@estibalizromana.com, www.estibalizromana.com, https://anchor.fm/estibalizromanapodcast.
¡Sal de tu zona de confort, se libre y disfruta de tu vida al máximo!
¡Te espero el próximo Domingo!