La tragedia de la Dana nos ha tocado el Alma y nos invita a pensar en cómo ayudar desde la conciencia, una ayuda que va más allá de lo visible. Para los que estamos lejos, es momento de tratar de estar en paz, sin dejarnos arrastrar por el torbellino emocional que baja nuestra energía. Desde la distancia podemos elegir cómo elevar la vibración colectiva, enviando nuestra energía y apoyo a quienes más lo necesitan. ¿Cómo podemos hacerlo?
ENTIENDE COMO NOS AFECTA EL CONSUMO DE IMÁGENES DE TRAGEDIA
Cada vez que vemos imágenes de la tragedia, el cerebro y el corazón reaccionan. Al ver escenas de dolor, nuestro subconsciente no siempre distingue entre lo que nos sucede a nosotros y lo que ocurre a otros. Esto significa que, aunque no estemos allí físicamente, cada imagen nos impacta, se queda grabada en nuestro subconsciente y despierta emociones de miedo y dolor.
Ver una y otra vez las imágenes de una tragedia nos lleva a revivirla de forma constante, tanto para quienes la sufrieron como para quienes la observan desde fuera. Los afectados reviven su dolor cada vez que ven esas escenas, mientras que el resto de nosotros absorbemos ese miedo en nuestro subconsciente, aumentando la sensación de inseguridad y angustia. Este ciclo de negatividad no ayuda a nadie y, peor aún, nos desvía de la posibilidad de ofrecer ayuda real.
ELEVA TU VIBRACIÓN PARA AYUDAR VERDADERAMENTE
Es natural que, al ver el sufrimiento de otras personas, surjan emociones de rabia, ira e impotencia. Sin embargo, quedarnos en esa frecuencia emocional nos consume e impide apoyar verdaderamente. El miedo, la angustia, el resentimiento son emociones de baja vibración, y cuando permanecemos en ellas, sin quererlo, contribuimos a un ambiente colectivo cargado de negatividad y miedo.
Podemos elegir otra respuesta: una respuesta que eleve y sane. Elegir mantener una vibración alta no significa ignorar la tragedia o minimizar el dolor de quienes sufren. Al contrario, se trata de estar presentes con compasión, manteniendo la claridad mental y el corazón abierto para ofrecer apoyo real. Ser alguien que irradia paz, esperanza y fortaleza, no alguien atrapado en el miedo o la desesperanza.
¿QUÉ PODEMOS HACER PARA APOYAR DESDE LA DISTANCIA?
Elige Conscientemente el Contenido que Consumes. La elección de ver o no ver imágenes de la tragedia es una forma de apoyar. No necesitas estar expuesto constantemente a las escenas de destrucción para sentir empatía o ayudar. Elige fuentes de información que se enfoquen en soluciones y en la recuperación. Busca noticias que informen, sin caer en el sensacionalismo que aviva el miedo y la ira.
Céntrate en la Bondad y la Solidaridad
En lugar de compartir imágenes de la tragedia, elige imágenes o noticias de ayuda y superación. De esta forma inspiramos a otros a unirse y promovemos una vibración positiva. La solidaridad y el apoyo mutuo tienen un poder multiplicador que eleva tanto a quien ayuda como a quien recibe el apoyo.
Medita y envía energía de Amor y Paz
Aunque puede parecer sutil, la meditación y la intención de enviar amor y paz a quienes lo necesitan tiene un impacto profundo. La energía es real, y cuando meditamos con la intención de enviar alivio y consuelo, estamos actuando desde el corazón y contribuyendo a una vibración colectiva más elevada. Donde ponemos nuestra atención, ponemos nuestra energía. Pon tu atención en la paz, la recuperación y el amor, y contribuye a un cambio positivo.
Realiza Pequeños Actos de Ayuda Consciente
No se trata solo de grandes gestos; los pequeños actos en tu entorno también suman. Apoya a organizaciones de ayuda, contribuye con campañas de donación o incluso acompaña a alguien que esté pasando por un momento difícil.
Cuida Tu Propia Energía y Bienestar
A veces, queremos ayudar tanto que nos olvidamos cuidar de nosotros mismos. Mantener nuestra energía alta y nuestro bienestar no es egoísta, es fundamental para apoyar a otros. Practica actividades que eleven tu vibración porque cuanto mejor estés tú, más energía y claridad tendrás para ofrecer ayuda desde el corazón.
La tragedia del Dana nos recuerda lo valiosa que es la vida y la importancia de vivir el presente pues nunca sabemos lo que va a suceder, en un instante todo puede cambiar.
Desde la distancia, podemos elegir elevar nuestra energía y ofrecer apoyo desde la paz interior, sin dejar que la emoción nos desborde.
Los afectados necesitan nuestro acompañamiento emocional y espiritual, no que revivamos su dolor con imágenes repetidas de la tragedia. Podemos cambiar nuestra perspectiva y enfocarnos en la ayuda consciente elevando juntos la vibración colectiva.
Si estás atravesando este momento difícil y sientes que necesitas apoyo, estoy aquí para acompañarte de forma gratuita. No estás solo; estoy contigo en este momento.