La proliferación de los patinetes eléctricos como vehículo usado en los desplazamientos de miles de españoles, especialmente en las ciudades, ha ido acompañada de cierta polémica.
Y es que, a pesar de las indudables ventajas de este vehículo de movilidad personal (VMP), como su agilidad y bajo coste económico y de mantenimiento, se han generado controversias como la de si es necesario que cuenten con un seguro obligatorio, algo que ha obligado a incluir menciones a estos VMP en la última Ley de Tráfico y Seguridad Vial que entró en vigor en marzo de 2022.
No obstante, la mayoría de la población, incluyendo muchos usuarios de patinetes, todavía desconocen las reglas y recomendaciones de Tráfico en relación a estos vehículos, algo que a menudo provoca sensación de inseguridad entre los peatones y que ha llevado recientemente a prohibir los de alquiler en París por votación popular.
En 2022 se contabilizaron en España unos 800.000 patinetes eléctricos y según Formaster, Asociación Profesional de Empresas Formadoras en Logística, Transporte y Seguridad Vial, estos VMP están involucrados en el 4,13% de los accidentes con víctimas que se producen en zonas urbanas. Además, sus conductores ya son el 2% de los fallecidos por accidentes de tráfico en ciudad y el 4% de los conductores heridos graves o que necesitan hospitalización.
El informe muestra además que en un tercio de los siniestros que involucran patinetes eléctricos y otros VMP, los conductores incumplen alguna norma o conducen temerariamente.
Las infracciones más habituales con VMP
Las más habituales son conducir en sentido contrario o por un lugar prohibido, como las aceras o zonas peatonales, o invadir el carril contrario, conductas presentes en el 34,4% de los accidentes con patinetes eléctricos implicados.
La siguiente causa de peligrosidad es no respetar la prioridad en un ceda el paso o stop, con un 22,6% de usuarios accidentados por esta causa. En tercer lugar está no respetar los límites de velocidad de estos vehículos y, en cuarto, no respetar los pasos de peatones.
Además hay una práctica muy común, especialmente entre los más jóvenes, y muy peligrosa, que es llevar un segundo pasajero, algo que está considerado como una infracción grave, pues son vehículos para una sola persona. Sin embargo, el estudio de Formaster indica que el 2,4% de las víctimas por accidente de VMP iba como pasajero.
El informe también ha señalado que el 34,1% de los patinetes accidentados tenía alguna anomalía, como no llevar luces reflectantes o carecer de freno o timbre.