«Cariño, te tendré informada de todo». Este fue el afectuoso mensaje que envió Koldo García, exasesor de Ábalos y uno de los cabecillas de la trama de las mascarillas, a la entonces presidenta del Govern, la socialista Francina Armengol. A través de mensajes telefónicos Armengol facilitó a Koldo García el teléfono de la entonces consellera de Salut, Patricia Gómez. Recordemos que Armengol negó en el Congreso de los Diputados y en el Parlament haber facilitado ningún contrato a Koldo cuando se supo que el Govern que ella presidía pagó 3,7 millones por unas mascarillas defectuosas. El uso de la palabra «cariño» en sus los mensajes confirma que sí existía una relación bastante estrecha entre Koldo y Armengol. Y de mucha confianza.
Más datos.
La unidad de investigación de la Guardia Civil sigue recabando datos sobre la intervención de Armengol en el caso de las mascarillas. Se están buscando correos electrónicos y mensajes telefónicos entre la expresidenta y el exasesor para conocer el grado de implicación del Govern en este caso de corrupción. Lo importante ahora es saber si existía también una conexión entre Koldo y el PSOE, si Armengol recibió instrucciones de su partido para premiar a esta trama que se dedicaba a ganar dinero en plena pandemia a través de los gobiernos autonómicos gobernados por los socialistas.
Mintió.
A la espera de disponer de más información sobre el escándalo, se ha confirmado que Armengol mintió en sede parlamentaria. No dijo la verdad sobre el tipo de relación que tenía con Koldo y tampoco desveló el motivo por el cual el pago de las mascarillas fake se realizó con tanta celeridad. Ella no sabía nada y todo lo gestionaban desde la Conselleria de Salut, pero los mensajes apuntan directamente a la actual presidenta del Congreso de los Diputados. Armengol se encuentra en una situación de extrema debilidad y de poco servirá que Iago Negueruela, portavoz socialista, intente desviar la atención y acusando al actual Govern de beneficiar a una trama dirigida por socialistas. De momento ya sabemos que Armengol mintió.