La presidenta del Govern, Marga Prohens, asumió el reto demográfico como primer gran problema de Baleares en la primera jornada del debate de política general en el Parlament. Lo definió como «el reto del crecimiento poblacional que vivimos en Baleares, con el hecho de ser el máximo exponente de la España que se llena en un territorio limitado como son nuestras Islas». De ahí la necesidad de dar respuestas y articular medidas para frenar esta tendencia cada vez más creciente del crecimiento demográfico. En 2000 la población del Archipiélago era de 845.000 habitantes, y a principios de este año ha alcanzado 1.244.000 habitantes, casi 400.000 más y un incremento de un 47%. Durante este periodo la población de Baleares ha aumentado el triple que la de España y ocho veces más que en la Unión Europea. Las previsiones del Instituto Nacional de Estadística apuntan a que en los próximos quince años la población de las Islas Baleares aumentará un 20%,lo que en números absolutos se traduce en casi 230.000 personas más. «Un crecimiento insostenible y una realidad que las administraciones ya no podemos ignorar», concluyó la presidenta Marga Prohens.
«Hemos llegado al límite»
La presidenta del Govern pone el dedo en la llaga al recordar que habíamos llegado al límite en el número de visitantes durante el verano y que hemos llegado al límite en la llegada de inmigrantes de manera irregular. Frenar el crecimiento de la población en un territorio con recursos limitados, con impacto sobre el agua, la energía, la vivienda y el transporte, implica a todas las administraciones y agentes sociales.
Baleares, un territorio frágil y finito
No es posible planificar las infraestructuras y los servicios de mañana con este desarrollo. Baleares es un territorio frágil y finito, que debe cambiar la tendencia. Abierta la cuestión ahora corresponde a los grupos parlamentarios pronunciarse y alcanzar acuerdos para fijar las medidas que deben ser aplicadas y gestionadas por todas las instituciones de Baleares, sean del color político que sean.