El Senado aprobó ayer, con un solo voto de diferencia, varias enmiendas presentadas por el PP que introducen importantes bonificaciones y compensaciones destinadas a reducir los costes de insularidad para los residentes en Balears.
Para que tengan eficacia y puedan aplicarse, lo que, sin duda beneficiará, a todos los ciudadanos de este archipiélago, es preciso que ahora las enmiendas sean aprobadas por el Congreso de los Diputados e incorporadas a los Presupuestos Generales del Estado del 2006.
Llama la atención el voto contrario de todos los senadores del PSOE, incluidos los de Balears, a unas enmiendas que, con independencia de su evidente rédito político para quien las promueve desde la oposición, resultan muy positivas y satisfactorias para los residentes en Mallorca, Menorca y las Pitïuses. Entre las mejoras destaca el avance de la aplicación del cincuenta por ciento del descuento para los trayectos aéreos y marítimos al 1 de enero de 2006, a cargo del Govern Balear. Estos adelantos serán reembolsados por el Estado a partir del 1 de enero de 2008. En segundo lugar, descuentos adicionales para familias numerosas residentes en Baleares; y la equiparación del plus insularidad de los funcionarios de Balears con los de Canarias. Otro importante acuerdo consiste a que, en el plazo de tres meses, se reunirá la comisión mixta Estado-Comunidad Autónoma para estudiar el transporte aéreo entre islas y los destinos peninsulares.
Los senadores del PP se apuntaron ayer un buen tanto y dejaron en evidencia al PSOE que ahora deberá espabilar para dar una respuesta convincente si pretende votar en contra e impedir en el Congreso de los Diputados la introducción de estas enmiendas. El sentido común y la compensación de los costes de insularidad en Balears exigen un acuerdo de Estado que deben suscribir PSOE y PP.