Estimados lectores. ¡Feliz año! Espero que hayan recargado las pilas para lo que se nos avecina que es mucho y muy variado. No lo ha dicho Rappel. Lo ha dicho nuestro Presidente Mariano, que no es que sea adivino. Es que es además de soso, práctico. Y eso estimados lectores, puede resultar harto tedioso para aquellos, los mas díscolos, pues no da tantas, ni tan buenas noticias, ni tan divertidas y animadas, como cabría esperar; así a voz de pronto, como los noticiones que nos dejan míster Iglesias y su adlátere, el boquita de piñón, ese, llamado Errejón. Ese dueto que marcha al más puro ritmo musical de la Paloma San Basilio, y que podría resumir los en tan solo un estribillo: «Juntos, amor para dos, amor en buena compañía. Si tú eres así, que suerte que ahora estés junto a mí. Juntos, café para dos, fumando un cigarrillo a medias»¡En fin! Ahora ya conocen que la historia de nuestro país está plagada de comediantes, por supuesto, no tan buenos como los del club de la comedia o el club dels comediants, y ya ni les cuento, como los majestuosos Tip y Coll, aunque también rocen como estos, sin gracia alguna, el arte de la política de lo absurdo. Y es que en toda comedia española que se tercie, y más siendo un dueto; a alguien siempre le ha tocado hacer de payaso listo, y a otro, vamos a decirlo para no herir susceptibilidades, ser un poco menos inteligente que el primero. Y crean me, - Se lo juro porque este país va a borrar el paro de las listas de aquí a 200 años, y que seguirá habiendo fondos para pagar las pensiones de aquí a dos meses- , les digo que la profesión de payaso es la más difícil del planeta, pues consiste en vender ilusiones, sonrisas, y felicidad, todo ello a pesar de que el mundo en el que vivimos no sea precisamente adalid para el optimismo. Pues bien: eso es la política, señores y señoras, llevada al más puro extremo de la misma; la sin política, la apolítica; o como quieran llamar la ustedes en estos tiempos que nos van a tocar vivir. No importa lo que vendes. Importa como lo vendes. Y te lo compraran por internet como quien se compra en wallapop o en Ebay unas bambas que te vienen grandes o estrechas, pero no importa. Luego resulta que en las tiendas de zapatos, estos mismos que eligen al estilo Chimo Bayo de «Exta sí, exta nó, exta me gusta, pero me la como yo», dan por saco a nuestros comerciantes, haciendo les sacar montañas de zapatos, o de lo que sea. Ganas dan de cerrar los comercios y montar en la puerta una tienda virtual y a verlas venir; pues así está el patio hoy en día; que no hacen otra cosa los comerciantes que verlas venir; pero venir malas, lo que se dice malas, a peor. Por eso, Errejón el listo, el inteligente, Errejón, Pablito,o cualquier otro bombón que se tercie en este mundo divino del espectáculo de masas, para justificar su propia existencia, y como no, su propio futuro, está predestinado a la exposición constante a la radiación que emiten los foros de las redes sociales. Y ya saben cómo puede acabar eso: lo que no te mata te hace más fuerte. Y de ahí a Godzila contra King Kong hay un paso. Ya veremos qué pasa en su congreso.
OPINIÓN | Enrique Moreno Torres
El club de la comedia
Enrique M. Torres | Eivissa |