Cuando comenzamos nuestra andadura en ADAR, manifestamos nuestra vocación de informar de aquellas cuestiones referidas al ciclo del agua y al reciclaje que podían ofrecer dudas respecto al tratamiento que de ellas hacían las instituciones insulares. A nadie se le escapa que hay determinados aspectos que se ‘cocinan' de puertas adentro (por cuestiones técnicas, económicas, políticas,...) y sólo son de dominio público cuando están ultimadas. No tendría que ser así porque siempre hay que recordar que los representantes electos lo están para servir a la ciudadanía y no deben escudarse en que las decisiones de calado no se pueden dejar al criterio de personas sin información. Como decíamos en el texto sobre La Gestión del Agua, el camino más honesto y más justo debería ser el de informar a todos los vecinos de las opciones que tienen en temas que afectan notablemente en su día a día. Un ejemplo claro de lo que decimos es la planta de triaje. ¿Puede alguien que no esté conectado con el Consell d'Eivissa decir a día de hoy si definitivamente se va a construir, si la oferta presentada por la concesionaria es viable técnica y económicamente, en qué medida va a repercutir en nuestro bolsillo? Recordemos que hablamos de la piedra angular para conseguir acercarnos al 50% de reciclaje obligatorio que marca la UE para el año 2020 y que de no cumplir, acarreará sanciones y medidas como la de considerar el vertedero como ilegal. A todos aquellos que cumplen cada día con el tratamiento correcto de sus residuos domésticos, ¿no puede afectarles negativamente ver que un trabajo que hacen puede no servir para el propósito general? Pero vamos más allá: ¿hay preocupación en la sociedad ibicenca por este asunto capital?
Decimos esto por el contraste que nos supone comprobar como nuestros vecinos comunitarios de Menorca tienen una actitud bien distinta ante los problemas:
- Se propusieron rescatar del olvido el Camí de Cavalls y, a día de hoy, está considerado patrimonio histórico de la isla y bien de interés cultural por la CAIB, y es una ruta frecuentada por turistas y senderistas. ¿Qué defensa han tenido en Ibiza los restos arqueológicos?
- Se opusieron a proyectos de edificación en la emblemática Plaça dels Pins y consiguieron que siga siendo un espacio libre, fuente de oxígeno para Ciutadella, donde se pueden encontrar parques para los niños, aparatos de deporte, pistas de petanca,… mientras que aquí, cualquier espacio era bueno para construir si había dinero.
- Han conseguido mediante presión día a día de los empresarios y los ciudadanos acelerar el ritmo de obras del puerto de la misma Ciutadella que amenazaban con no estar acabadas para la fiesta grande del día de San Juan. ¿Qué presión hemos inyectado en nuestra isla a las numerosas obras? ¿Cuantas reparaciones más tendrá la travesía de Jesús ? ¿Por qué se inician obras con la llegada de la temporada?
- Si bien nuestro propósito, como decíamos al principio, era el de informar, no es menos cierto que teníamos en paralelo un objetivo más profundo y es el de motivar a nuestros vecinos para conseguir que se manifiesten, que defiendan nuestros derechos ante la avalancha de intereses privados que asolan la isla desde hace tiempo.
Circulan desde hace días por la red unas fotos que son ilustrativas del estado en el que se encuentra el puerto de Ibiza y que, más allá de concitar nuestro cabreo no han sido detonante para que se produzca una propuesta organizada en la que dejar claro que ésta no es la Ibiza que queremos, que no todo vale en temporada, que no estamos dispuestos a que se acabe con todo nuestro entorno, que es a su vez nuestro patrimonio. Las fotos las ha hecho un pescador harto de ver como hay continuos vertidos ante los que las autoridades no hacen nada. En ADAR estamos recabando información sobre estos incumplimientos y esperamos plasmarlo en una denuncia pero os recordamos que todos podéis ejercer vuestro derecho a denunciar aquello que creáis que atenta contra los intereses de la mayoría. Si no queréis señalaros vosotros podéis informarnos a las asociaciones que intentaremos dar cuerpo a vuestras reclamaciones. Necesitamos unirnos para defender nuestro espacio; el esfuerzo merecerá la pena.