Pese al año y lugar en el que vivimos, es chocante constatar cómo algunas personas manejan las cosas como si de una república bananera se tratase y que todos debemos aceptar los mangoneos como algo natural y habitual. Concretamente, el objeto del siguiente escrito, es poner de manifiesto la perniciosa forma en que el Sr. Rafa Ruiz, actual alcalde y candidato del PSOE a repetir en el cargo, efectúa sus lamentables triquiñuelas para evitar perder votos ante lo que ha sido su nefasta gestión del municipio.
Para ello, este año en el que la feria medieval vuelve a coincidir con la campaña electoral, ha publicado un bando en el que niega la colocación de mesas informativas en la zona medieval y, sorpresa, también en el paseo de Vara de Rey, que es un lugar emblemático, de gran circulación de personas y en el que no hay mercat medieval (de hecho, no hay actos programados, y por no aparecer, ni aparece en el plano del evento).
¿Por qué no se permite la instalación de mesas informativas con el consenso de otros años? Pues porque así evita que miles de personas tengan la oportunidad de conocer otras opciones políticas distintas a la suya y teme perder la poltrona.
Curiosamente, preguntados por qué no se ocupa el paseo como en las anteriores elecciones, el Sr. Ruiz y su séquito han perdido la memoria y no recuerdan que hace cuatro años se llegó a un acuerdo entre todos los partidos para no hacer campaña en el espacio destinado al mercado medieval, y en cambio, destinar el paseo de Vara de Rey a la colocación de mesas informativas. Esa es una de las olvidadizas y frecuentes pérdidas de memoria que tanto convienen...
Esta actitud bananera provoca que los distintos candidatos que hacemos campaña debamos solicitar espacios repartidos por el resto de la ciudad, por supuesto, espacios en los que no hay tanta concurrencia de personas. Curiosamente, el espacio más cercano a Vara de Rey y por el que más personas circulan lo han pedido varios partidos. ¿Saben cuál ha sido el primero en solicitarlo? El PSOE, qué curioso...
Para que no se sienta solo el alcalde en la confluencia de la calle Madrid con la avenida Ignacio Wallis y en previsión de la jugada, nosotros también hemos solicitado este mismo lugar, así que podrá disfrutar de nuestra agradable compañía todo el fin de semana.
Esta trilerística forma de actuar del Sr. Ruiz, tampoco es nueva y no sorprende. No se podía esperar otra cosa de quien consiente las ilegalidades de los negocios familiares, o usa el despacho de Can Botino como su cortijo particular para divertirse con los colegas…
Hasta el 26 de mayo hay lo que hay. Ese día, tendremos una nueva oportunidad para elegir a un alcalde digno para esta ciudad.