Sant Antoni vivió este viernes una de sus noches más mágicas donde el espíritu navideño se adueñó de todo el pueblo. Centenares de vecinos y vecinas del municipio no quisieron perderse el tradicional encendido de luces y del árbol de Navidad, una de las citas más destacadas del año.
Niños correteando entre castillos hinchables, familias paseando bajo las luces navideñas y jóvenes disfrutando de la primera jornada de las populares casetas navideñas. Nadie quiso perderse el primer día navideño en un Passeig de ses Fonts en el que no cabía un alfiler.
La jornada arrancó a las 18.30 horas con un discurso del alcalde de Sant Antoni, Marcos Serra, acompañado por Miguel Tur, concejal de Fiestas, y unos entrañables elfos navideños, Mirtel y Triste. «Cada año trabajamos con mucho cariño para que estas Navidades sean una realidad. Renovamos las luces, hemos añadido nuevos hinchables y seguimos apostando por el hilo musical y el mercado navideño y gastronómico», explicó Serra, destacando el esfuerzo y la dedicación de Tur en estos años. «Como cada año terminaremos con una cabalgata de Reyes que tendrá sorpresas», puntualizó.
Luces e ilusión
En este sentido, Serra animó a todos a disfrutar de las más de cinco semanas que se extenderá la programación navideña en el municipio, con más de 40 actuaciones musicales en directo y actividades que engloban tanto a los más pequeños como a adultos. «Esperemos que os guste. Creemos que somos un referente no solo en el municipio sino en toda la isla», concluyó el alcalde, momentos antes de que una decena de niños y niñas tomasen el protagonismo al pulsar el botón que encendería el árbol navideño ante la mirada y los ‘flashes’ de la gente.
Tras una cuenta atrás de diez segundos y la ovación final del público, Sant Antoni se iluminó por completo. El ambiente festivo continuó con un ‘show’ navideño a cargo del Estudio de danza Adrián Pineda, seguido de varias actuaciones de los alumnos de las escuelas del municipio. «Al final la Navidad es para ellos, por su ilusión», comentó Maite, una vecina del municipio, haciendo referencia a los más pequeños. «Se lo están ‘currando’ mucho con la decoración y las luces. Al final, esto es lo que da vida al pueblo en estas fechas», concluyó.
Como no podía ser de otra manera, el nuevo carrusel navideño fue uno de los grandes éxitos de la jornada entre los niños y niñas. Así como los decorativos muñecos iluminados, donde muchos vecinos aprovecharon para sacarse una divertida foto para dar la bienvenida a las fiestas. «Hoy estaban muy ilusionados porque decían que empieza la Navidad», aseguró una vecina de Sant Antoni que se acercó al centro del municipio con sus dos hijos.
Asimismo, el Passeig de ses Fonts congregó una gran variedad de puestos artesanales, incluyendo joyería y bisutería, productos textiles y productos gastronómicos ibicencos, así como recuerdos y ‘souvenirs’ navideños. No obstante, uno de los grandes reclamos fue, sin duda, las casetas navideñas que ya gozaron de éxito el año pasado. «Los niños vienen por las luces y los adultos por las casetas», comentó entre risas Jaime, vecino del municipio, que asegura que durante mes y medio serán «un punto de encuentro» para todos en Sant Antoni.
Durante más de cinco semanas, el Passeig de ses Fonts se convierte en un auténtico cuento de Navidad lleno de actividades, música y sorpresas para todos los públicos.