La Colla de Balansat conmemoró sus seis décadas de promoción del ball pagès, la danza y la cultura tradicional en Sant Miquel con la celebración del II Festival Balansat Balla. El encuentro, que tuvo lugar este sábado en la plaza del pueblo, reunió a agrupaciones locales e invitadas en una jornada marcada por la música, las danzas y la memoria compartida de la tradición ibicenca.
La jornada comenzó a las 18:30 horas con un pasacalles que recorrió el Carrer d’Eivissa hasta la plaza de Sant Miquel. Este desfile inaugural sirvió como anticipo del ambiente festivo que se viviría a lo largo de la tarde. Acto seguido tuvo lugar la apertura oficial del festival, con la plaza ya llena de vecinos y visitantes que se acercaron para disfrutar de un programa que combinó tradición, espectáculo y convivencia.
El pasacalles no fue únicamente un acto de apertura, sino también una forma simbólica de llevar la cultura desde las calles hasta el corazón de la localidad, donde se desarrolló el grueso de la programación.
El festival contó con un elenco de artistas y agrupaciones que dio forma a una velada variada y dinámica conducida por la miquelera Tita Planells de Can Planes. Actuaron Stela Roselló, el Grup de Danses La Delicà de Gandia, Maria Mateu Ramón y Joan Costa, la Asociación Folklórica Virgen de la Soledad, llegada desde Cáceres, así como la Colla de Labritja y la propia Colla de Balansat.
La combinación de grupos locales e invitados ofreció al público una experiencia cultural rica en matices, en la que cada actuación aportó un matiz diferente dentro de un mismo hilo conductor: la preservación del folklore y la transmisión de la tradición a las nuevas generaciones. Este cartel puso de relieve la importancia de la colaboración entre agrupaciones de distintos territorios, subrayando la universalidad de la danza y la música tradicional como lenguajes comunes.
El II Festival Balansat Balla convirtió la plaza de Sant Miquel en un escenario abierto donde la danza, la música y la alegría popular fueron protagonistas. Más allá del espectáculo, el evento se vivió como una celebración comunitaria que reunió a generaciones diversas en torno a un patrimonio cultural que sigue vivo y en constante renovación.
El público disfrutó de una tarde en la que tradición y presente dialogaron de manera natural, reafirmando el papel del ball pagès como símbolo de identidad y orgullo colectivo.
Un vídeo para la memoria
Para conmemorar este 60 aniversario, la Colla de Balansat impulsó además la producción de un vídeo que recoge momentos históricos e imágenes de archivo de la agrupación. Esta pieza audiovisual, concebida como un testimonio de la memoria colectiva, permitirá acercarse a la evolución de la colla a lo largo de las décadas.
El proyecto fue posible gracias a la colaboración del Consell d’Eivissa, el Arxiu d’Imatge i So d’Eivissa y el Consell de Formentera, que contribuyeron con material y apoyo institucional.
Mirada al futuro
Con este festival, la Colla de Balansat celebró su 60 aniversario reafirmando su compromiso con la preservación del folklore ibicenco. El evento fue, al mismo tiempo, un homenaje al pasado y una invitación a mirar hacia el futuro, consolidando la voluntad de seguir transmitiendo el ball pagès y la cultura tradicional a las nuevas generaciones.
La cita dejó constancia de que, seis décadas después de su fundación, la Colla de Balansat sigue siendo un referente en la promoción de la identidad cultural de Sant Miquel y de toda Ibiza.