Cartón tras cartón, los números que se van cantando se tachan a toda velocidad. No siempre es fácil seguir el ritmo, pero todos los presentes se esfuerzan por hacerlo. Cerca de 150 personas participaron ayer en el ya tradicional bingo solidario de Sant Josep. Muchos de ellos llevan desde su primera edición, hace ya más de quince años, sin faltar a la cita el día de Navidad. En esta ocasión la asociación Ibiza-IN ha repetido como beneficiaria del evento que ha permitido a tantos vecinos disfrutar de una actividad diferente en un día tan especial y se recaudaran alrededor de mil euros por una buena causa.
A partir de las seis de la tarde la carpa empezó a llenarse de gente dispuesta a pasar un buen rato a la vez que participaban en esta iniciativa solidaria. A la hora de comenzar ya casi no quedaba ningún hueco en una carpa que estuvo casi llena durante las dos horas que duró el evento. Ocho partidas en las que ocho afortunados tuvieron la suerte de cantar bingo con unos cartones que oscilaban entre uno y dos euros de coste.
La asociación Ibiza-In ha sido la beneficiaria del 50 % de lo recaudado con los cartones. Con ello, se emprenderá un proyecto de musicoterapia para que los niños y niñas con autismo «puedan aprender a controlar sus emociones». Para ello es necesario una importante cantidad económica «tanto para los instrumentos como para contratar a un instructor». El objetivo último de esta fundación es «fomentar que todas las personas puedan disfrutar de las mismas actividades, sin distenciones por su funcionalidad».