El Consell de Formentera presentó ayer un nuevo proyecto de reciclaje pionero con el que se pretende potenciar la costumbre de reciclar entre los vecinos y visitantes de la isla mediante recompensas.
De momento, se han instalado cinco contenedores con un mecanismo especial capaz de compactar latas y envases de plástico; concretamente, dos en Sant Francesc, dos en Sant Ferran y uno en Es Pujols.
La práctica es muy simple. Al depositar los residuos en ellos, cada usuario recibirá unos tiques acumulables que serán intercambiables por regalos: un amplio surtido de detalles entre los que se encuentran gorras, bolsas de tela, sombreros, pulseras o cuentos.
Teniendo en cuenta que la tasa de reciclaje en la menor de las Pitusas se concentra en torno al 24%, el gobierno insular ha decidido actuar en consonancia y dotar a esta acción del valor añadido de los ‘ecopuntos'. Tal y como reconocía la consellera de Medio Ambiente, Daisee Aguilera: «Lo importante de esta campaña es valorar la respuesta del usuario y si incentivándolo y premiándolo podemos mejorar las tasas de reciclaje».
Además, la consellera subrayó que también se pretende lograr que «no se liberen plásticos y latas en el entorno natural» y que económicamente esta acción beneficie a la administración. «Podremos obtener más residuos reusables y tener así también un mayor beneficio económico y presupuesto medioambiental para Formentera».
Paralelamente, las empresas patrocinadoras aseguraron que su compromiso con esta acción será aportar al proyecto ‘Save Posidonia' la cantidad en dinero equiparable a los envases que se recojan.
Los contenedores llevan varios días presentes en la isla y algunos vecinos ya han podido hacer uso de ellos. Por lo general, la recepción es bastante satisfactoria, sin embargo los usuarios piden «mayor atención», porque su funcionamiento parece no ser aún del todo óptimo.