Gent per Formentera volvió a desmarcarse este martes de sus socios de gobierno del PSOE en el Consell insular y presentó en solitario una serie de alegaciones al borrador de decreto de Transporte Marítimo. Según denuncia la formación política en un comunicado, el documento elaborado por el Govern balear «no limita el exceso de trayectos entre Ibiza y Formentera ni tampoco el número de excursiones de un día» hacia la pitiusa del sur. En este sentido, aseguraron que el decreto «contribuye a convertir Formentera en una atracción turística de un día y favorece la saturación del Parque Natural y del puerto».
Criticaron a su vez que, tras 12 años, desde las administraciones balear y estatal no han sido capaces de dar solución a las cuatro peticiones básicas que se han venido realizando desde el Consell: garantizar una barca a primera y última hora, poner límite a las excursiones marítimas, impedir que salgan y lleguen barcas a la misma hora y reducir de manera efectiva los atraques y las frecuencias de embarcaciones de línea regular y de excursiones.
«Insistimos en la necesidad de que cualquier decisión que se tome relacionada con el puerto de Formentera y nuestro transporte marítimo se tiene que adaptar a las necesidades de nuestra población y, a la vez, a la capacidad de carga de la isla», concluyeron.
Por su parte el Consell de Formentera, como institución, también anunció este martes la presentación de alegaciones al borrador del decreto de Transporte Marítimo para pedir, entre otras cuestiones, que se evite el «solapamiento» y el «exceso» de servicios en temporada estival de la línea regular entre Formentera e Ibiza.
Para ello, desde la institución insular piden que, durante los primeros dos años de aplicación del decreto, se hagan estudios de sostenibilidad medioambiental y que en el tercer año se apliquen las soluciones.
Asimismo, reclaman que se garanticen los servicios mínimos en la línea regular entre las Pitiusas, con especial atención a los barcos de primera y última hora.
Por último, las alegaciones se refieren a las excursiones marítimas, que Formentera quiere que garanticen la «accesibilidad universal» con la eliminación de barreras arquitectónicas. Para ello, podrán contar con un periodo de adaptación, como marca la Ley de Accesibilidad de las Islas Baleares