El presidente del Consell de Formentera, Llorenç Córdoba, se ha mostrado este martes tranquilo tras conocer que ha sido objeto de una denuncia ante la Fiscalía por malversación.
En declaraciones a Europa Press, el también diputado ha acusado a la Comisión de Ética, que ha interpuesto la denuncia, de actuar con mala fe.
Según la denuncia, Córdoba habría contado con los servicios de un letrado del Consell para elaborar las alegaciones presentadas el pasado 17 de octubre en las que solicitaba la recusación de dos de los cinco miembros de la Comisión y la suspensión del proceso de entrega al pleno del informe elaborado por la entidad, utilizando así con fines «puramente privados» los servicios de un funcionario.
El presidente insular, sin embargo, ha lamentado la filtración de un informe que tenía que presentarse en el pleno y que ha pedido que se paralizara hasta que se resolviera la recusación, como «un movimiento más» de las personas que quieren expulsarle.
Córdoba, además, ha expresado su preocupación por el hecho de que mientras que ahora eran movimientos de políticos ahora son movimientos de otras personas que no lo son.
El presidente insular se ha mostrado molesto por el modo de actuar de la Comisión de Ética y que en vez de atender su demanda de paralizar la redacción del informe haya filtrado el documento.
Cabe recordar que Córdoba ha sido denunciado ante la Fiscalía por un presunto delito de malversación de fondos públicos.
Según ha informado este martes Ràdio Illa Formentera, Córdoba habría utilizado con fines «puramente privados» los servicios de un funcionario, según un escrito presentado ante Fiscalía por la Comisión de ética y buen gobierno del Consell.
El escrito de la Comisión recuerda que los letrados del Consell tienen la función de defender jurídicamente la institución, pero no asumir la defensa jurídica de los miembros electos del Consell.