El Centro de Salud mental Infantil y Juvenil del Patronato de Salud Mental atendió durante 1998 a 310 niños y adolescentes de las Pitiüses que padecen trastornos mentales.
El trastorno adaptativo es uno de los más frecuentes. El niño sufre síntomas depresivos, de ansiedad o de comportamiento a consecuencia de la adaptación a un suceso que ocurre a su alrededor, como el caso de la separación de los padres. Depresiones, ansiedad en la adolescencia e hiperactividad en los niños son otros de los trastornos que predominan en Eivissa. Casos de autismo y problemas de alimentación también se atienden en las consultas, aunque en menor proporción. Doce niños con trastorno generalizado del desarrollo, más conocido como autismo, se atendieron el año pasado, frente a siete adolescentes con problemas de alimentación.
El jefe de sección del área de salud mental, el psiquiatra Javier Ruiz, advierte que «los adultos con problemas psíquicos iniciaron sus episodios en la adolescencia, generalmente antes no se notaban y se interpretaba que era crisis de adolescencia», explicó. Sin embargo, muchas de estas crisis «ocultaban auténticos episodios depresivos que ocurren en esta etapa de la vida», añadió.
Comparativamente con otros años, la proporción es similar. De los 310 niños y adolescentes atendidos en 1998 en el Patronato de Salud Mental, 160 eran nuevos. Durante 1997 se registraron 163 casos nuevos.
El departamento de salud mental infantil y juvenil dispone de un psiquiatra y un psicólogo. A juicio de Ruiz, estos medios son suficientes «para hacer los tratamientos psiquiátricos y los seguimientos psicológicos», pero no para realizar un tratamiento psicoterapeútico ya que «haría falta un psicólogo clínico».
El psiquiatra señala que desde el Patronato de Salud Mental se cubre la asistencia básica, «pero para terapias no damos abasto». Cuando se abordan este tipo de tratamientos psicoterapeúticos, Ruiz añade que «todo es poco, siempre estamos por debajo de lo deseable».
Anorexia o bulimia que pueden esconder una
depresión
La anorexia y la bulimia son otras de las enfermedades que se
atienden en el Patronato de Salud Mental, aunque en menor
proporción que el resto de las patologías. Durante 1998 se
atendieron tres casos de anorexia y cuatro de bulimia. El
especialista advierte que muchos de los casos que se remiten al
Patronato con problemas de alimentación esconden «trastornos
depresivos y de ansiedad acompañados de manías de comer».