La asamblea insular de Cruz Roja en las Pitiüses tiene previsto realizar nuevos cursos de formación para socorristas para poder garantizar un servicio efectivo de vigilancia en las playas de Eivissa y Formentera. La demanda que han realizado todos los ayuntamientos insulares ha desbordado las previsiones iniciales de la ONG que intensifica estos días la preparación de la temporada del 2000.
Según explicó el presidente de la Asamblea Insular de Cruz Roja, José Colomar, el hecho de que los hoteles y establecimientos turísticos estén obligados, por ley, a contratar a socorristas titulados ha afectado al número de personas que solían prestar este servicio a Cruz Roja, que se encarga de formar a las personas que se quieran dedicar al socorrismo. Según Colomar, varios monitores, 3 médicos y 5 ATS forman el equipo encargado de ofrecer los cursos de socorrismo a los interesados. «Esperamos no tener problemas pero no podemos competir con las empresas que ofrecen contratos de seis meses mejor pagados, a pesar de ello, trabajamos para poder dar un buen servicio», apunta.
José Colomar avanzó que ya se están vigilando varias playas de las Pitiüses y que, en breve, se firmarán todos los convenios de colaboración con los ayuntamientos. En este sentido, el presidente de la Cruz Roja confirmo que ya se ha llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento de Sant Antoni. El convenio incluye la cobertura de vigilancia en el litoral de este municipio con 3 socorristas, una lancha neumática y la lancha grande con base permanente en el puerto de Portmany. Santa Eulària ha pedido también este servicio mientras que Sant Josep ha solicitado vigilancia para ses Salines. Las previsiones apuntan a que unos 28 socorristas cubrirán el servicio durante el verano del 2000.